Cien senegaleses ilegales rodean y amenazan de muerte a una unidad policial en Palma y los agentes reciben órdenes de no intervenir

Platja de Palma, cada vez más, se está convirtiendo en un auténtico polvorín donde los enfrentamientos entre turistas, vendedores ambulantes ilegales de origen subsahariano y la policía se repiten continuamente.

En la madrugada del martes al miércoles, en las inmediaciones de la calle Pare Bartomeu Salvà, una unidad de agentes del GAP (Grup d’Actuació Preventiva) de la Policía Local de Palma estaba identificando a un vendedor ambulante ilegal cuando, de manera sorprendente, el mismo se abalanzó sobre ellos e intentó agredirles. Rápidamente, los funcionarios consiguieron reducirle y procedieron a su detención por un presunto delito de atentado contra agentes de la autoridad.

En ese instante, una multitud de compatriotas senegaleses del arrestado, trataron de evitar su detención, rodearon a los policías y les amenazaron de muerte.

Tras solicitar refuerzos, más de 40 agentes de la Policía Local de Palma formaron un cordón de seguridad y trataron de tranquilizar a los alborotadores. Durante los altercados, varios senegaleses, visiblemente alterados y nerviosos, quemaron papeles en la calle, les insultaron y amenazaron.

Los agentes de la Policía Local no tenían órdenes por parte de sus mandos, de realizar una carga y disolver al grupo instigador y los policías tuvieron que aguantar provocaciones, insultos y amenazas de muerte.

Tras solicitar ayuda al Cuerpo Nacional de Policía, dos furgones de la UIP (Unidad de Intervención Policial) llegaron al lugar, se desplegaron y, en menos de un minuto, el centenar de senegaleses ya se había dispersado. Muchos turistas hacían fotos y grababan lo que estaba sucediendo. «En Alemania es imposible ver algo así. Se están riendo de la policía y no hacen nada. En mi país ya estarían todos detenidos», concluye un turista germano.
De vergüenza

DI.- La presión de «unos 20 0 30» senegaleses que se congregaron en el retén de la Policía Local de Sant Josep (Ibiza) llevó ayer a los responsables del mismo a dejar en libertad a un vendedor ambulante al que habían detenido por resistencia grave a la autoridad. Según explicó el jefe de la Policía Local del municipio, Jaume Ramon, eran «unos 20 ó 30 senegaleses» que exigían la puesta en libertad de su compañero. Ramon se reunió con ellos, tras lo cual decidió dejar en libertad al detenido, que quedó imputado por un delito de «resistencia grave activa» a la autoridad.

Según la información a la que ha tenido acceso este diario, «más de diez hombres de nacionalidad senegalesa muy agitados y dando gritos», llegaron a entrar en el Ayuntamiento «irrumpiendo gravemente el orden público».

En consecuencia, «para evitar un desenlace grave, y ante la facilitación de datos personales por parte de estos individuos a la fuerza pública, se puso en libertad al detenido a instancia de Jefatura policial, apercibiéndole de las consecuencias de no comparecer ante la autoridad judicial cuando sea citado».

La decisión de dejarlo en libertad se adoptó sobre las 16.30 horas «para evitar alteraciones graves del orden público por parte de este grupo de vendedores ambulantes en el pueblo de Sant Josep». El jefe de la Policía Local restó importancia a lo sucedido y añadió que «en cualquier caso», el hombre habría quedado en libertad, siempre imputado por resistencia grave a la autoridad.

Venta ambulante

Para arrestar al senegalés C.I. fueron necesarias tres patrullas de la Policía Local. La detención se produjo en la playa de ses Salines, cuando estaba realizando venta ambulante de pareos. Los hechos ocurrieron por la mañana. Un agente intentó darle el alto, pero C.I. se metió al mar y no quería salir. «¡No! ¡No me da la gana! ¡Venid a por mí si queréis!», gritaba.

Permaneció varios minutos en el agua, pero finalmente accedió a salir. Sin embargo, cuando se encontraba cerca del agente que le iba a detener le lanzó un pareo al rostro y comenzó una huida en la que golpeó al menos a cuatro turistas. Los refuerzos policiales ya habían llegado, pero un grupo de unos 20 vendedores ambulantes intentó que C.I. no fuera arrestado. Finalmente, los agentes lo redujeron, pero antes, según la información recogida por este diario, el senegalés asestó un rodillazo en los testículos a uno de los agentes locales.

Fuentes policiales explicaron que posteriormente al incidente en la comisaría se averiguó que el detenido podría hallarse en situación de libertad condicional por la comisión de un delito contra la salud pública –lo que, según estas fuentes, explicaría por qué se resistió a su detención–. Si se hubieran consultado sus antecedentes, añadieron estas fuentes, el caso y el detenido se habrían remitido a la Guardia Civil.

Además, según aseguraron, tampoco viviría en el domicilio cuya dirección facilitó a la Policía Local, donde debería recibir la citación para comparecer ante el juez por este último arresto y cuya veracidad no se habría comprobado antes de ponerlo en libertad.

Un Policía Nacional se halla ingresado en la UCI de Son Espases en estado muy grave tras ser golpeado por un individuo de nacionalidad senegalesa que permanecía en el módulo de detenidos del citado centro y era conducido a una revisión médica.

El suceso tuvo lugar ayer tarde cuando una pareja de la Policía Nacional se hallaba en Son Espases con el detenido que iba a someterse a una revisión médica acorde al derecho que asiste a todos los detenidos al respecto.

Sin que se hayan filtrado más datos que permitan conocer las circunstancias exactas de lo ocurrido, lo que si ha trascendido es que mientras los agentes esperaban junto al detenido para ser que fuera atendido, este propino un fuerte puñetazo en la cara al agente que cayó desplomado al suelo y entrando en parada cardiorrespiratoria.

El agente fue atendido de inmediato por profesionales de Son Espases que consiguieron estabilizarlo aunque tuvo que quedar ingresado en UVI en estado muy grave debido a las heridas sufridas.

Se estudia ahora si la lesión sufrida por el agente ha sido causada por el golpe que le ha propinado el detenido o si ha sido consecuencia del golpe sufrido por el policía al impactar contra el suelo ya que dependiendo de ello, las responsabilidades penales son diferentes pues en el primer caso podría intentar demostrarse la intencionalidad de lesionar al haber una relación directa entre golpe y lesión causada mientras que en el segundo caso, podría dictaminarse que las lesiones han sido debido a un accidente y que el agresor no tenía intención de causar el daño que ha hecho.

La Policía Nacional detuvo a un hombre que acuchilló al azar a una mujer que estaba paseando a su perro en una calle próxima a la avenida de Ausiàs March en la ciudad de Valencia. Las puñaladas causaron a la víctima múltiples cortes en los brazos cuando se protegía la cara. El individuo, que tiene antecedentes delictivos, utilizó un cuchillo de unos 20 centímetros de hoja.

Los violentos hechos ocurrieron poco antes de la una de la madrugada del pasado lunes. La víctima observó cómo un hombre perseguía a otra mujer, y sin ningún motivo aparente, el individuo se dirigió a ella y comenzó a apuñalarla “de forma brutal y sorpresiva”, según fuentes policiales, con el cuchillo de cocina que llevaba en la mano.

Ante los gritos de desesperación de la víctima, un vecino recriminó al agresor y logró que cesara su brutal ataque. El hombre salió corriendo, pero fue apresado poco después en una calle cercana. Varias patrullas de la Policía Nacional acudieron al lugar con urgencia y pidieron una ambulancia para que los sanitarios atendieran a la mujer.

Tras difundir por sus emisoras las características físicas del autor, los agentes localizaron en las inmediaciones a un sospechoso cuyas características físicas coincidían plenamente con la descripción del agresor facilitada por la víctima y el testigo.

El hombre, al detectar la presencia policial, arrojó al suelo una mochila que llevaba y emprendió la huida, aunque fue interceptado poco después. Tras cachearlo, los agentes le intervinieron un cuchillo que llevaba escondido en el pantalón. Ante tales evidencias, el individuo fue detenido como presunto autor de un delito de homicidio en grado de tentativa.

El agresor, de 40 años de edad y nacionalidad senegalesa. El juez de guardia decretó su ingreso en prisión. Como viene siendo ya habitual, se intenta atenuar la gravedad del suceso al señalarse la presunta perturbación mental del criminal de origen africano.LD.

Un ciudadano de origen senegalés de 25 años hará frente el próximo mes de mayo en la Audiencia Provincial en Oviedo a una condena de once años de cárcel acusado de asaltar el piso de una vecina de Gijón a la que luego violó en su habitación. Los hechos tuvieron lugar, tal y como relata la Fiscalía en el escrito de conclusiones provisionales, a las doce y media del mediodía del 24 de mayo del pasado año.

El representante del ministerio público asegura que el presunto delincuente entró en un edificio de la calle Mon y llamó al timbre del inmueble de la denunciante. “Cuando la chica abrió la puerta el procesado se abalanzó sobre ella”, afirma la Fiscalía. El reo obligó a la chica a ir hasta el dormitorio y abusó sexualmente de ella. La joven, de 18 años, pidió auxilio a voces. Los vecinos que escucharon los gritos llamaron a la Policía.

El acusado se encuentra cumpliendo una orden de prisión provisional dictada horas después de su arresto. Ahora la Fiscalía le acusa de un delito de agresión sexual y de otro de allanamiento de morada por el que pide, además de la condena de cárcel, que el reo pague una indemnización de 6.540 euros a la víctima por las lesiones y los daños morales sufridos. Además el ministerio público exige que se imponga una orden de alejamiento que impida al extranjero acercarse a su víctima o comunicarse con ella por cualquier medio durante los próximos 15 años.

Éste no es el único juicio por abusos sexuales que verá la Audiencia Provincial el próximo mes. En el banquillo de los acusados también se sentará un vecino de la ciudad acusado de agredir a una joven a la que había conocido en un bar de copas de Gijón. La Fiscalía asegura que el reo “sorprendió a la chica por la calle, la agarró y la llevó hasta su casa”, un inmueble situado en la calle Ezcurdia. En este caso la víctima pudo librarse del ataque golpeando en la cabeza al agresor con unas llaves que le habían caído al suelo al detenido poco después de entrar en el inmueble. La joven encerró al acusado dentro del piso y pidió ayuda a los vecinos. La Policía Nacional pudo detener al responsable de los hechos en el domicilio en donde seguía encerrado cuando llegaron las patrullas alertadas por los testigos.

El representante del ministerio público pide que este segundo agresor sexual sea condenado a una pena de 3 años y ocho meses de cárcel. Además el representante del ministerio público solicita que el presunto agresor que se sentará en el banquillo de los acusados abone a su víctima 2.280 euros en concepto de indemnización. Link

Un senegalés ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Almería a 19 años y seis meses de prisión por raptar a un menor de seis años que se encontraba jugando al fútbol en un parque ubicado en el barrio de las 200 viviendas de Roquetas de Mar (Almería) y abusar sexualmente de él en una vivienda semiderruida y en el interior de un garaje comunitario, donde fue sorprendido por unos vecinos.

Se da por probado en el fallo del tribunal que el acusado agarró por la mano al pequeño sobre las 20,00 horas del 5 de febrero de 2015 y lo trasladó a la chabola, donde le amenazó de muerte mientras abusaba mediante tocamientos de él. Tras ser expulsado de la vivienda por otro individuo, se desplazó con la víctima hasta el garaje-sótano de un edificio situado en una calle de la misma localidad, donde consumó su agresión sexual y donde permaneció con el niño hasta las 4,00 horas, momento en el que fueron encontrados por vecinos del lugar que estaban batiendo la zona.

El informe psicológico constata que el menor sufrió lesiones físicas a consecuencia de los abusos, y que también presenta una sintomatología consistente en rechazo y miedo al agresor, evitación y fuertes sentimientos de malestar y vergüenza al abordar la temática, llanto en el momento de la revelación y en días posteriores a la supuesta vivencia, inquietud e irascibilidad, miedo a la oscuridad, despertares nocturnos, miedo a salir solo a la calle, miedo generalizado a adultos de raza negra y aprendizaje de la sexualidad inadecuado.

La sentencia contempla los delitos de abuso sexual continuado por los dos episodios y de detención ilegal, también impone al condenado diez años de libertad vigilada, diez años de destierro de Roquetas de Mar y 15 años de alejamiento del menor a una distancia de 500 metros, así como a la prohibición de comunicarse con él.

Leónidas Tur

Un musulmán de origen senegalés trató de matar a un policía en Madrid.

Un hombre de 28 años, musulmán, procedente de Senegal, apuñaló el pasado 22 de mayo a un policía nacional que acudió a una vivienda, junto a varios compañeros, para auxiliar a una mujer que estaba siendo amenazada.

Los hechos, que se han conocido este martes, tuvieron lugar en el madrileño barrio de Lavapiés, donde este lunes, un reportero de Telecinco fue agredido con una piedra por un sudamericano.

Agentes del grupo de Seguridad Ciudadana del distrito Centro de Madrid, acudieron al número 48 de la calle Amparo, donde una mujer estaba siendo agredida por el senegalés.

Los agentes lograron localizar al ciudadano senegalés, que trato de huir a la carrera ante la presencia de estos. Tras una persecución por las calles aledañas, el hombre entró en la casa de su ex pareja, de la que tenía orden de alejamiento.

El hombre, que empuñaba un cuchillo de 23 centímetros, gritaba: “A esta puta la mato. Ya me detuvieron por su culpa. Otra vez no me detienen. La voy a matar”.

Justo antes de la detención, el musulmán de origen senegalés, trató de matar a uno de los policías apuñalándole en el pecho. Afortunadamente, el cuchillo no logró traspasar el chaleco antibalas del agente, salvándole la vida.

Un senegalés que amenazaba a las chicas con un cuchillo para poder violarlas, ha sido detenido este jueves por los Mossos d’Esquadra en Barcelona.

Tras ser detenido y comparecer ante el juez, este ha decidido enviarlo a prisión provisional al haber sido acusado de violar a una chica y de amenazar de muerte a cinco menores de edad para robarles el teléfono móvil.

El hombre, un inmigrante procedente de Senegal, tenía 29 años.

Los agentes del distrito de San Martí iniciaron la investigación en el mes de noviembre, cuando tuvieron conocimiento de que un hombre siempre asaltaba a las víctimas cuando estas usaban su teléfono móvil.

El hombre las atacaba cuando entraban en el portal de sus vivienda y las amenazaba mostrando un cuchillo, asegurando que las mataría si no le daban el móvil.

Las declaraciones de las vítimas y las imágenes de las cámaras de seguridad, permitieron que los agentes tuvieran una descripción gráfica del asaltante.

Los Mossos d’Esquadra le siguieron en varias ocasiones hasta que finalmente fue detenido. Posteriormente, todas las víctimas confirmaron que el detenido era el delincuente.

Tras conocerse el caso, los vecinos de Barcelona se han mostrado muy indignados, principalmente con Ada Colau, quien en varias ocasiones ha pedido la llegada de más refugiados e inmigrantes a la Ciudad Condal.

Asco de ¿justicia?

El Juzgado de Instrucción Número 1 del Puerto de la Cruz, Tenerife, investiga un caso de violación múltiple a una joven tinerfeña, de 19 años, por parte de tres individuos de nacionalidad senegalesa.

Los hechos se habrían producido el pasado 8 de abril y, aunque se han intentado ocular por la nacionalidad de los presuntos autores, ahora trascienden a la prensa. La joven fue drogada en una discoteca y llevada a una vivienda en la que los inmigrantes procedieron a violarla salvajemente.

A la mañana siguiente, la víctima se encontraba ausente y desorientada deambulando por las calles de La Laguna y fue trasladada al Hospital Universitario de Canarias, donde fue atendida.La Policía detuvo a uno de los africanos, de 31 años, que se defendió diciendo que “las relaciones habían sido consentidas”, El individuo, de forma inexplicable, fue puesto en libertad.

Los detenidos tienen 24 y 26 años. Huyeron cuando una amiga de la víctima los descubrió perpetrando la violación.
Los dueños del local, según fuentes policiales, se negaron a facilitar las cosas a los investigadores. Después cedieron.

La Policía Nacional ha detenido en Granada a dos varones de 24 y 26 años como presuntos responsables de violar a una mujer en la discoteca Quilombo, del centro de Granada, en el barrio de Doctores. Los jóvenes habrían agredido sexualmente a una mujer en el interior de los baños del local.

Ambos hombres, de nacionalidad senegalesa, están acusados de un delito contra la libertad e indemnidad sexual de la joven. Sucedió en la noche del pasado viernes. Después de la agresión, que ambos hombres cometieron al mismo tiempo, dejaron abandonada a la joven en los baños.

Según relatan fuentes de la investigación a EL ESPAÑOL, fue una de las amigas de la joven quien descubrió la violación en los baños. No encontraba a su amiga y, cuando se puso a buscarla, se encontró la puerta de los baños atrancada. Empezó a empujar una y otra vez y, cuando logró desatrancarla, se encontró con la escena. Ambos estaban violando a su amiga. Los dos hombres huyeron del lugar y la dejaron tirada en el suelo.

La actitud de los responsables del local

Minutos después, las jóvenes acudieron a los responsables de la discoteca a denunciar los hechos. Según fuentes policiales cercanas al caso, no las creyeron y las obligaron a marcharse del local. A las cinco llamadas realizadas por EL ESPAÑOL al local, ninguna ha sido respondida.

La noticia fue avanzada por el diario Ideal y confirmada por este periódico. La víctima fue trasladada al hospital para obtener las pruebas forenses que determinan si hay o no agresión sexual. Después, el grupo policial de la UFAM inició la investigación con la que localizar a los presuntos agresores. Dieron con ellos en apenas tres días: uno fue detenido el mismo fin de semana. El otro, tres días después. Ninguno tiene antecedentes por incidentes anteriores.

En cuanto conocieron los hechos a raíz de la denuncia de la joven, los agentes del grupo UFAM de la Comisaría Provincial de Granada se dirigieron a la discoteca para obtener las pruebas necesarias con las que poder armar la investigación: solicitaron las grabaciones de las cámaras internas, la documentación del local, hablar con algunos testigos, con el personal de vigilancia y con los responsables del lugar.

Estos, en un primer momento, según fuentes policiales cercanas a la investigación confirman a EL ESPAÑOL, se negaron y mostraron grandes reticencias ante la perspectiva de facilitar esa información. No se mostraron colaborativos. Finalmente, no les quedó más remedio que ceder lo que la Policía les estaba exigiendo, esencial en la investigación.

Ya con los datos obtenidos, establecieron un dispositivo policial con el fin de identificar y localizar a los agresores, que dio como resultado la localización y detención primero de uno de los individuos y días después del segundo. Ambos han sido ya puestos a disposición judicial. link

“La Manada de Alá” ataca de nuevo: dos musulmanes (de nacionalidad senegalesa) puestos en libertad con cargos tras haber violado a una joven granadina en los baños de la discoteca Quilombo, ¡en pleno centro de la capital andaluza!, en el barrio de Doctores.

Si los agresores hubieran sido españoles hoy, “Día contra la violencia de Género” las televisiones no hablarían de otro cosa y en todas las manifestaciones de España las femiestalinistas clamarían por esta violación.

Pero claro, los criminales son musulmanes y eso implica la inmediata puesta en libertad (no vaya a ser acusado de xenófobo Su Señoría) y el silencio absoluto de las locas del ¡no es abuso, es violación!, el ¡hermana, yo sí te creo! y el ¡abajo la cultura del hereropatriarcado!

Los mismo que la joven violada ¡por 15 miembros de "La Manada de Alá"! en Badalona.

Estas víctimas no tienen derecho a la solidaridad porque los agresores son musulmanes y claro, es su cultura, lo manda su religión y para ellos todas las españolas son unas putas herejes.

¿Hasta cuándo va a seguir la sociedad adormecida y sin reaccionar? ¿Hasta cuándo se va a creer el español las mentiras y el adoctrinamiento de “la prensa del sistema”?

A La Tribuna de España no nos da miedo que nos acusen de xenófobos; vamos a seguir denunciando que los moros van a acabar con nosotros si no somos capaces de terminar nosotros con ellos.

Hoy la joven violada no será recordada por las seguidoras del femipodemismo. Ni la joven de Badalona. Ni las mujeres que, casi todos los días, son violadas en España por miembros de “La Manada de Alá”. Claro, ellos son los de “La Religión de la Paz”.

A las malditas farsantes de la defensa de la mujer les agravia más este artículo -que seguramente denunciarán por incitación al odio- que todas las niñas, adolescentes y jóvenes que diariamente son violadas por musulmanes. Y eso que, en la mayoría de los casos, la propia policía omite la nacionalidad y la religión de los agresores.

¡Pobres negritos que llegan en patera! Hay que proporcionarles vivienda, comida y prestación económica, aunque los españoles necesitados carezcan de ella...

¿No entienden que no es un problema de color de la piel? No se trata de ser blanco o negro, sino de qué religión profesan y qué ordena hacer el maldito Corán con las herejes...

Hoy es el demagogo Día contra la violencia de Género”. Ninguna denuncia a quienes violan porque lo manda El Corán.

El Islam es sinónimo de violación. Basta ya de farsas y de buenismo. Mahoma fue un pederasta. Los musulmanes que vienen a España tienen carta libre para violar a nuestras muejeres. A las pruebas me remito...

Josele Sánchez

Los Mossos d’Esquadra detuvieron el pasado miércoles a un senegalés de 24 años vecino de Blanes (Gerona) al que acusan de haber abusado sexualmente de una niña de 11 años en su entorno familiar. Según han informado profesores de la escuela donde estudia la niña que habrían tenido conocimiento de que la menor sufrió abusos hace unos meses por parte de un joven de su entorno familiar.

Los docentes activaron el protocolo por supuestos abusos y llevaron a la niña a un centro médico para que le hicieran una exploración.

Asco de país, de políticos, periodistas y jueces.

La Policía ha detenido a un senegalés de 34 años en Àger, Lérida, acusado de un delito de asesinato en grado de tentativa. Los hechos sucedieron el pasado sábado a media tarde. El detenido asestó varias puñaladas a un conocido suyo de 44 años que quedó gravemente herido.

Fueron los testigos quienes avisaron a los agentes de los Mossos así como a una ambulancia de que había un hombre tendido en el suelo con numerosas heridas por arma blanca. Cuando llegaron los facultativos, la víctima fue evacuada en un helicóptero medicalizado a un hospital de Barcelona.

Los agentes trataron de localizar al sospechoso, que se había dado a la fuga. Para ello, establecieron un dispositivo policial para tratar de dar con él. Pasadas unas horas consiguieron su ubicación gracias a unos testigos y fue detenido.

Después de pasar a disposición judicial, el Juzgado de Instrucción de Guardia de Balaguer ha acordado la prisión provisional sin fianza para el detenido, a la espera del juicio. Link

Ver para creer. El inmigrante senegalés Papagore Ndoye, ex militar y con numerosos antecedentes de gravedad, sigue sin ser expulsado de España pese a que recientemente fue detenido por agredir a siete policías en Gijón.



Fue en el barrio de El Llano, en Gijón, donde el senegalés agredió a los policías que acudieron a la llamada de los vecinos, que alertaban de la presencia de este violento inmigrante, que estaba destrozando el mobiliario urbana y se estaba enfrentando a los vecinos con los que se cruzaba.

Rápidamente una patrulla de la Policía Nacional acudió al lugar donde los vecinos alertaron del incidente. Allí los agentes se encontraron a Papagore Ndoye, «alteradísimo». Finalmente se necesitaron a siete policías para reducir a este peligroso inmigrante africano. Uno de los agentes heridos sufrió una fractura de mano.

No es la primera vez que este inmigrante se enfrenta a la policía. Hace cinco años, Papagore Ndoye se enfrentó a seis policías en la calle de Juan Alvargonzález, hiriendo a todos ellos con policontusiones y erosiones de piel. En 2015, también fue arrestado por herir a un agente de la Policía Local en una cafetería.

Pese a su gran historial de antecedentes, la Justicia sigue sin expulsarlo de España. Ndaye cuenta con una orden de expulsión del territorio español, pero la Audiencia Nacional debe resolver el recurso interpuesto por el ciudadano senegalés.

El inmigrante africano sigue sin ser expulsado de España

Las siempre diletantes cadenas de televisión se limitarán a decir que un hombre, sin especificar nada más, violó a una turista y ahía se acabó todo, pero la historia tiene detalles y matices relevantes.

Ocurrió el pasado 23 de septiembre de 2019 en un hostal de Chueca. La víctima es un turista mexicana y el violador un senegalés.

El suceso se produjo entre las cuatro y las cinco de la madrugada. La víctima, estaba sola de vacaciones en la capital, a donde había llegado a mediados de agosto.

La Policía investiga ahora los hechos, tras la denuncia presentada por la mujer.

Según su versión, todo comenzó en el céntrico barrio madrileño. En el Hostal Motion conoció al agresor, que se hospedaba en el mismo lugar.

Tras ir a cenar a un bar de la plaza del Rey, él intentó llevarla por la fuerza al hotel. Comenzó a besarla y a manosearla, a lo que la chica opuso resistencia. Por miedo, no salió corriendo.

Una vez en el hotel, él la introdujo, según su versión de los hechos, en una de las habitaciones de la planta baja. La forzó, a pesar de sus intentos por zafarse del agresor.

Al escuchar los gritos, desde el hospedaje llamaron a la Policía para que la víctima denunciase lo que acababa de pasar. PD.