Barcelona multa al dueño de un bar por enfrentarse a los musulmanes

Sergio García, propietario del bar Mediterráneo que hay al lado de la Mezquita Tariq Bin Ziyad, en la calle Rafael del barrio barcelonés Ciutat Vella, ha denunciado las molestias que le ocasionan las personas que asisten al culto y dice que ha recibido amenazas por recriminar a la gente que se descalce y se sacudan los calcetines en la puerta de su establecimiento.

"Incluso uno me sacó una navaja", ha explicado en declaraciones a e-notícies. "Quieren entrar al baño por cojones -ha denunciado-. Si los echo, amenazas. De momento, todo son amenazas hasta que un día la amenaza llegue algo". "La persiana la tengo llena de escupitajos", ha añadido.

El propietario del establecimiento ha apuntado que "la gente no se atreve a pasar por la calle" y que sus clientes no pueden salir a la calle a fumar por "el mal olor que hace". "Estamos en un país en el que supuestamente estamos desprotegidos porque nadie me ayuda y pago mis impuestos para que las autoridades ayuden a la mezquita".

Sergio García también ha explicado que el Ayuntamiento no le hace caso y que le han multado "por tener unos carteles fuera" del bar cuando, según él, "lo único que hacía era evitar algo que se pusieran en la puerta a ponerse los calcetines y los zapatos".

Finalmente, ha pedido al alcalde de Barcelona, Xavier Trias, que facilite un espacio dentro de la mezquita para que las personas que van se "quiten y pongan los zapatos, como si se han de lavar los pies, y salgan la calle como cualquier ciudadano que sale de un establecimiento". Estas cosas, sólo pueden pasar en España. Me insultan, me escupen y me amenazan'