Los agujeros negros son “portales hacia otros universos”, según nuevos resultados cuánticos

Los agujeros negros no son lo que se creía antes, pueden abrir entradas a otros universos según los últimos estudios.

Según la teoría de la relatividad de Albert Einstein, los agujeros negros son inhabitables profundidades del espacio-­tiempo que terminan en una “singularidad”, o una masa de densidad infinita. Es un lugar tan oscuro que incluso las leyes de la física se rompen ahí abajo. Pero ¿y si los agujeros negros no son tan amenazantes como consideramos que son? Y si son una especie de puerta estelar intergaláctica, o tal vez incluso un viaje a otro universo?

Puede sonar como la premisa para una película de ciencia ficción, pero los nuevos cálculos de los físicos cuánticos sugieren la idea que una puerta estelar podía realmente ser la mejor teoría. De acuerdo con los nuevos resultados sorprendentes, los agujeros negros no culminan en una singularidad. En su lugar, representan “portales a otros universos”, informa la revista New Scientist.

Esta nueva teoría se basa en un concepto conocido como “bucle cuántico de gravedad” (LQG). Fue formulada por primera vez como una manera de combinar la mecánica cuántica y la relatividad general estándar con el fin de remediar la incompatibilidad entre los dos campos. Básicamente, propone que el espacio­-tiempo es granular o atómico en la naturaleza; se compone de piezas diminutas e indivisibles sobre el mismo tamaño que la longitud de Planck ­. Lo cual es equivalente a cerca de 10 – ­35 m de tamaño.

Los investigadores Jorge Pullin de la Universidad Estatal de Louisiana, y Rodolfo Gambini, de la Universidad de la República en Montevideo, Uruguay, analizaron los números para ver lo que ocurre dentro de un agujero negro bajo los parámetros LQG. Lo que encontraron fue muy diferente de lo que sucede, de acuerdo con la relatividad: no había ninguna singularidad.

En la relatividad general, si cae en un agujero negro es, en algunos aspectos, más como caer en un pozo muy profundo que tiene un fondo, sólo que en lugar de tocar fondo, es presionado en un solo punto,­ una singularidad,­ de densidad infinita. Con un pozo tan profundo no hay “otro lado”. La parte inferior de su caída en el centro del pozo, y la singularidad “a” caer por el agujero negro (o al menos la singularidad, tiene más sentido decir que está “cayendo”).

Su experiencia sería muy diferente viajando en un agujero negro de acuerdo con LQG, sin embargo, al principio puede que no note la diferencia: la gravedad aumentaría rápidamente. Pero justo cuando te acercas a lo que debería ser el núcleo del agujero negro en su lugar, comienza a disminuir, que sería como si estuviera siendo absorbido, sólo para ser escupido por el otro lado.

En otras palabras, LQG dice que los agujeros negros son menos como baches y más como túneles o pasajes. Pero pasajes ¿hacia dónde? Los investigadores dijeron que podrían ser atajos a otras partes de nuestro universo. O podrían ser portales a otros universos muy diferentes a los nuestros.

Curiosamente, este mismo principio se puede aplicar a la teoría del Big Bang. Según la teoría convencional, el Big Bang comenzó con una singularidad. Pero si el tiempo se rebobina según LQG, el universo no comienza con una singularidad. Por el contrario, cae en una especie de túnel, lo que conduce a otro universo mayor. Esto ha sido utilizado como evidencia de una de las teorías en competencia del Big Bang o Big Bounce.

Los científicos no tienen suficientes pruebas para decidir si esta nueva teoría es realmente cierta, pero la LQG tiene una cosa a su favor: y es que es más hermoso. O más bien, evita ciertas paradojas que las teorías convencionales son incapaces de explicar. De acuerdo con la relatividad, la singularidad dentro de un agujero negro funciona como una especie de cortafuegos, lo que significa que la información que se traga el agujero negro se pierde para siempre. La pérdida de la información, sin embargo, no es posible de acuerdo con la física cuántica

¿Tendrá verdadero valor científico?

Desde inicios del siglo, XX el hombre ha codiciado la posibilidad de crear un método que le permitiese transportarse por el mundo en pocos minutos. Los vehículos, aviones y barcos son solo una muestra de nuestro anhelo por conectar y traspasar fronteras. Sin embargo, ¿estarías dispuesto a pasar por intensos tormentos, pérdidas de la memoria e incluso la muerte por llegar a un lugar más rápido y en menos tiempo?

¿Ciencia o ficción?