¿El Genocidio Intencional de los Pueblos Europeos?

Estamos asistiendo como expectadores (en vez de sentirmos como víctimas), por primera vez en el mundo “civilizado”, a una paulatina e insidiosa desaparición de nuestros valores, cultura e historia europea, en manos de personas descerebradas y por ende cobardes -porque no imagino ninguna otra razón lógica, aparte de los intereses creados- que haciendo uso de un “poder” puntual en el que les ponen con sus votos las propias víctimas inconscientes e ignorantes, deciden destruir lo que tantos siglos, luchas, guerras y rebeliones nos costó defender a costa de las vidas de nuestros ancestros, tanto lejanos como cercanos. Ni siquiera a ellos se les está respetando. Su esfuerzo y el nuestro por sacar adelante un país, no tiene ningún mérito. Solo vale un “buenismo” tildado de moderno, una tolerancia y permisividad que esconde conformismo y cobardía y un “todo vale” al que se ha venido en llamar “democracia”.

La Historia se adapta y tergiversa a medida del político de turno, según sus intereses personales. Esas mentes obnubiladas, carentes de conciencia, de estrechez de miras, cuyos espíritus involucionistas están muy por debajo de la media, deberían estar controlados por profesionales de la psiquiatría y por las entidades de protección social, en vez de estar en puestos de poder, porque el resultado es el mismo que darle una tea a un pirómano. A las pruebas me remito. Y esto no ha hecho más que empezar.

“El genocidio ha sido practicado desde la antigüedad. En el pasado reciente, el Holocausto, el genocidio armenio, Ruanda, y Camboya bajo Pol Pot (auto-genocidio) vienen a la mente. El genocidio puede tomar dos formas: eliminar una población de forma directa o hacerla desaparecer de forma indirecta por otro tipo de acciones criminales. El genocidio indirecto ha sido cometido muchas veces en la historia. La actual “crisis migratoria” es parte de tal proyecto: el estancamiento demográfico de los pueblos europeos.

Genocidio Suave: Voluntario y Nihilista

Las naciones europeas son víctimas de un subrepticio intento de genocidio y eliminación cultural y demográfica, dirigido por sus élites xenófilas y etnomasoquistas. La primera en la historia. Las autoridades francas y belgas son las que más involucradas están en esta empresa de genocidio suave. Este es tanto físico como cultural.

Amparándose en la pseudoideología anti-racista, sin embargo, persigue un objetivo racial y racista: la eliminación gradual de las poblaciones indígenas europeas, especialmente Francia. Las elimina de cinco formas:

1.Al promover la migración de colonos no-europeos.

2.Al disuadir el índice natal indígena y penalizar a las familias de clase media.

3.Causar el exilio de fuerzas indígenas jóvenes mediante medidas impositivas punitivas.

4.Darle privilegios legales, económicos, y culturales a las poblaciones no-europeas por sobre las nativas.

5.Penalizar y castigar cualquier oposición al proyecto inmigracionista y su ideología.

Algunos en la Derecha reiteran que el “sistema”, el poder, el estado, y las autoridades de la Unión Europea se encuentran sin el poder y la capacidad de frenar una inmigración masiva y descontrolada. ¿Sin poder? Ellos son muy poderosos y más bien efectivos en lograr su objetivo: la limpieza étnica de Europa, comenzando por Francia.

En Francia, la ideología Trotsquista juega un rol central en este esfuerzo. Los burgueses y el Partido Socialista y sus consejeros, el think-tank Terra Nova, son la cabeza de lanza. Uno de sus líderes recientemente dijo que no se preocuparía demasiado por el Frente Nacional porque declinaría en poder por razones demográficas. Esta es una estrategia sutil, cínica, y consciente. Los electores de mente malvada desaparecerán en favor de los nuevos. Este “gran reemplazo” étnico es lo que ellos quieren.

Terra Nova (“nueva tierra”, nuevo país, nueva gente) es un lobby metapolítico muy efectivo, que influencia todas las esferas de poder. Sus cálculos electorales (atraer inmigrantes e ignorar las clases medias y populares locales) es motivado por su animosidad contra la Francia “étnica”. Esta hostilidad proviene de la ideología marxista-trotsquista, de la cual el “proletariado internacional” es el corazón: destruir afiliaciones nacionales, y sobre todo las de los europeos.

Que el islam sea sexista, reaccionario, anti-democrático, etc. no es un problema para los ideólogos trotskistas del Partido Socialista y Terra Nova, que no son en lo más mínimo “Republicanos”. Su objetivo obsesivo es la erradicación de los pueblos étnicos de Europa y especialmente Francia. ¿Esta ideología trotskista, “internacionalista” desde el comienzo, no es suicida para aquellos que lo defienden? Si, ¿y qué? No les importa. Porque no son lógicos ellos mismos, son nihilistas. Su objetivo es destruir lo que odian –la civilización europea- no construir un nuevo mundo en el cual ellos mismos no creen.

Las Hachas Estratégicas del Genocidio Suave

Los Medios usados, particularmente en Francia, como un laboratorio, son los siguientes. Obviamente los encontramos al nivel de la Unión Europea. Son simultáneamente asuntos ideológicos, económicos, y policiales.

Promover la inmigración. Permitir que pase o cínicamente promover los medios de colonización. La crisis “migrante” es la última demostración. Fuimos al máximo. Después de 30 años de inmigración (una gota) viene una inundación de millones de migrantes, bajo la etiqueta humanitaria de “refugiados”. Las autoridades europeas no están “incapacitadas” de frenar las oleadas migratorias; al contrario, ellos quieren profundizarlas. (Por ejemplo, la tontera angelical de la señora Merkel). Cualquier expulsión es declarada imposible. Sin más.

Promover la Islamización. Cualquier árabe-musulmán es sagrado e intocable por las autoridades, más allá de los ataques islámicos y las posturas militares contra el ISIS. El Favoritismo hacia el islam es una política de estado. Y, por lo tanto, la “islamofobia” es un pecado capital, una ofensa imperdonable.

Llevar a la pobreza y cargar impositivamente a las clases media y trabajador indígena. Les hacen pagar lo de los demás. Todas las medidas fiscales del gobierno socialista van en esta dirección: asistencia social incluso para los inmigrantes ilegales (una bomba de succión) financiada por los constantes incrementos sobre los franceses nativos.

Llevar a cabo políticas anti-natales y anti-familia. Al deconstruir el sistema de préstamos familiares, el gobierno logró reducir la tasa de natalidad de los franceses étnicos en 2015. Fue calculado. La gran familia de ascendencia francesa no es muy popular…

Practicar discriminación positiva. Esta es: preferencia extranjera y étnica en el momento de contratar para trabajar, en nombre del “anti-racismo”. Los administradores de compañías privadas y gubernamentales se ven fuertemente estimulados para sistemáticamente contratar y utilizar empleados de bajo nivel o calificación.

Asegurar la impunidad judicial para los ofensores extranjeros. Esta política, inaugurada por lo menos hace 30 años, fue acentuada por el señor Taubira hacia el Departamento de Justicia. Su orientación ideológica (otra forma esquizofrénica) es perfectamente clara: animosidad contra cualquiera que sea etiquetado “franco-europeo”.

Destruir la transmisión cultural en la educación. Hechándole culpa a la historia de Francia, desmantelando la enseñanza de griego y latín, destruir la gramática y la ortografía, degradando la enseñanza del lenguaje francés, desarraigando, promoviendo, y alabando las culturas de las poblaciones inmigrantes –islamismo, africana, y otras. Esta des-franquización y des-europeización es política estatal. La señorita Vallaud-Belkacem, Ministro de Educación Nacional “socialista” y pseudo-feminista, es la actriz sonriente, después de muchos otros ministros y unionistas de persuasión trotskista.

Suprimir y castigar toda resistencia a la ideología dominante. En la Jungla de Calais y las áreas de alrededor, los inmigrantes ilegales que cometen abusos no son castigados: los francos que se resisten, se manifiestan, y tratan de protegerse a sí mismos son golpeados, encarcelados, y perseguidos. Las represiones contra las “Demostraciones para Todos” obedecen la misma lógica. Todo el que defienda la identidad francesa es amenazado y castigado por el Estado “francés”. La misma represión es observable en los medios audiovisuales, impresos, o en internet. Los juzgados y la policía son tolerantes contra los invasores y ocupadores y son despiadados contra la resistencia francesa. Podrías llamarlo síndrome de Vichy, ¿verdad? (O Síndrome de Estocolmo...)

Colaboradores vs. Resistencia
Ambos campos están bien definidos. El Estado, los medios, el poder judicial, y la fuerza de la ley tienen misiones de contener y neutralizar cualquier resistencia de los pueblos indígenas y sus defensores. Estarían equivocados en creer que han ganado.

Aquellos que siembran los vientos de la guerra civil vendrán a cosechar el tornado. Será probablemente sangriento. No es la estupidez o el idealismo lo que los motiva. Es el odio consciente y el deseo de guerra; es colaborar con el invasor y apostar en su victoria. Pero también ponen en juego perder la guerra que causaron. Los resistidores (la resistencia) tienen más posibilidades de ganar porque se ven motivados por la lealtad a sus raíces, mientras que los colaboradores son esclavos de los maestros a los cuales aún pueden traicionar.
Por Guillaume Faye