Fiscalía admite que "se ha ido de las manos" el tema de los menores inmigrantes y defiende la repatriación

La Policía Nacional ha detenido en Palma a tres jóvenes menores de edad argelinos como presuntos autores de delito de agresión sexual, robo con violencia, así como a dos de ellos por un delito de odio.

Los hechos se produjeron a finales de verano del año pasado en el barrio de S’Indioteria de Palma donde se ubican varios establecimientos de ocio, sobre las cinco de la madrugada cuando dos víctimas salían de una discoteca y fueron acometidas por un grupo de jóvenes, a quienes previamente habían grabado por una pelea protagonizada por los mismos contra otro grupo.

Las víctimas no tenían relación con la pelea, tan solo se limitaron a grabarla por si les servía a los agredidos. El grupo de jóvenes se mostró amenazante y agresivo, dirigiéndose a las dos víctimas, uno de ellos agredió sexualmente a una de ellas, realizándole tocamientos en zonas íntimas, además de escupirle en la cara y empujarla.

Las dos víctimas fueron agredidas por varios miembros del grupo, sufriendo el robo con violencia de varios efectos, llegando otro varón a agredir sexualmente a una de ellas mediante tocamientos en zonas íntimas, llegando a intentar arrancarle el vestido.

Además de las agresiones y el robo, una de las víctimas fue objeto de insultos y vejaciones graves en contra de su orientación sexual.

La Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional, una vez que recibió la denuncia, llevó a cabo una investigación para el total esclarecimiento de los hechos, realizando numerosas gestiones, consiguiendo con las pesquisas identificar a tres jóvenes, tratándose de tres menores de edad, procediendo a su detención la semana pasada como presuntos autores de los hechos investigados. Los tres por agresión sexual, además dos por robo con violencia, dos por delito de odio y un delito maltrato de obra.

La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.

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Vecinos de la Sierra Norte se manifestaron en el municipio madrileño del Vellón (a 55 kilómetros de la capital, en el norte de la región) para exigir el cierre del centro de menas de esta localidad de la Comunidad de Madrid que, aseguran, está provocando problemas de inseguridad en este pueblo y en otros cercanos. Los residentes, vecinos de El Vellón, Pedrezuela y El Molar, se reunieron en la plaza del pueblo y más tarde acudieron a la puerta del centro de los menores tutelados para denunciar que, en los últimos días, varios de estos chicos conflictivos están provocando altercados graves con agresiones, robos y peleas. Aseguran, incluso, que este pasado fin de semana llegaron a volcar un vehículo tras una reyerta en el municipio de Pedrezuela en la que se vieron implicados los padres de varios jóvenes a los que robaron el teléfono móvil.

El propio alcalde de Pedrezuela, Rodrigo García, emitió ayer un comunicado diciendo que estos problemáticos menores "están sembrando el pánico y poniendo en riesgo la pacífica convivencia ciudadana" por lo que pidió su traslado de "forma urgente a otro lugar alejado de nuestras poblaciones, ya que tanto el Vellón como el Molar y Pedrezuela, carecen de los medios suficientes para el control de una situación que nos desborda pese a las buenas y generosas intenciones de todos".

El pasado domingo, algunos de esos indignados vecinos acudieron al centro de menas del Vellón y agredieron a dos de los trabajadores que salieron en defensa de los menores, según ha denunciado UGT. Este sindicato asegura que los trabajadores del centro fueron golpeados por personas que «han decidido tomarse la justicia por su mano» tras supuestamente tener «varios altercados» con algunos menores no acompañados que residen en este espacio. UGT asegura que dos de los educadores necesitaron asistencia sanitaria y que intervino la Guardia Civil.

Según la Comunidad de Madrid, el centro de menas del Vellón se abrió en noviembre de 2023. Está gestionado por la Fundación Samu y en él están alojados una docena de menores extranjeros tutelados por el Gobierno regional.

A tenor de los vecinos, varios de estos jóvenes han robado teléfonos móviles, han agredido a jóvenes y han amenazado a la gente. «Queremos vivir con tranquilidad. Solo pedimos eso. El pasado sábado estos chicos robaron a punta de navaja el móvil a tres menores durante una fiesta y uno de estos chicos también agredió de forma salvaje a un hombre, luego la liaron y hubo cinco vecinos heridos en la reyerta», según denuncia uno de los habitantes de El Molar.

La Guardia Civil confirma que han aumento los robos en la zona y que el pasado fin de semana hubo varios detenidos después de que se produjese una agresión.


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La tutela de menores extranjeros no acompañados (menas) en España se disparó en el año 2018 tras la llegada de Pedro Sánchez al poder. Sólo entre los años 2017 y 2018 la llegada de menas al país aumentó en casi un 200%, pasando de 2.345 a 7.026, según datos de la Fiscalía General del Estado (FGE). Desde entonces y hasta el año 2022, el Ministerio Fiscal ha realizado más de 36.000 pruebas para la determinación de edad de dichos menas.

Acorde a la información de la FGE a la que ha tenido acceso LA GACETA, entre los años 2018 y 2022 las diferentes fiscalías de menores formalizaron un total de 36.417 diligencias procesales para la determinación de edad de los menas llegados a territorio español de forma ilegal.

De las citadas diligencias, más de 20.000 diligencias se resolvieron arrojando una mayoría de edad (9.988), siendo archivadas (9.711) o quedando pendientes de resolución (574). Se decretó finalmente la minoría de edad en menos de un 45% de los casos.

Así, del total de más de 36.000 menas sobre los que se practicaron las pertinentes pruebas para la determinación de edad poco más de 16.000 (16.144) fueron declarados menores de manera firme. Sin embargo, casi 10.000 eran mayores sin ningún atisbo de dudas y sobre el resto tuvo lugar un archivo de las diligencias procesales «por abandono de los centros» por parte de los presuntos menores.

Fuentes policiales afirman que en gran parte de las ocasiones los presuntos menores extranjeros no acompañados abandonan el centro antes de la resolución de las pruebas porque «saben que son mayores». También se da el caso en el que estos inmigrantes «están de paso hacia Francia o Alemania» y utilizan los centros de tutela para estar unos días hasta que encuentran la forma de continuar su viaje.

La propia Fiscalía General del Estado llegó a reconocer en el año 2019 la existencia de altas tasas de diligencias procesales que arrojaban la mayoría de edad en algunas provincias españolas. «Han prevalecido los resultados de mayoría de edad en Málaga (69,45%) y Granada (66.84%)», concluyó en base a datos del año 2018.

Existen casos en los que muchos de estos presuntos menores pasan a los sistemas de tutela y permanecen durante meses en los centros de acogida sin que ni tan siquiera se les realicen pruebas por el gran cuello de botella que experimentan algunas fiscalías provinciales de menores. Según admitió el Defensor del Pueblo en el informe sobre la situación en Canarias publicado en 2021, más de 2.000 menas se encontraban en los sistemas de tutela autonómicos del archipiélago pese a no haberse practicado diligencias sobre los mismos.

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