El polo Norte se sigue moviendo y ya ha atravesado el meridiano de Greenwich
3 participantes
Página 1 de 1.
El polo Norte se sigue moviendo y ya ha atravesado el meridiano de Greenwich
El próximo año el polo norte magnético avanzará unos 40 kilómetros en su viaje hacia Siberia. Estos cambios obligarán a actualizar los sistemas de navegación, como el GPS
El interior de la Tierra está en constante movimiento. En lo más profundo existe una gigantesca esfera metálica, compuesta por una aleación de hierro y níquel. Está formada por un núcleo externo, que se encuentra en estado líquido y que alcanza un radio de casi 3.400 kilómetros. Dentro de él hay un núcleo interno, sólido y de unos 1.200 kilómetros de radio, que se cree que gira ligeramente más rápido que el resto del planeta (fenómeno que se conoce como superrotación). De hecho, se sospecha que los movimientos de ambas esferas generan el campo magnético de la Tierra. Estos también parecen ser los responsables de que los polos se muevan, de que se inviertan o de que la intensidad del campo magnético cambie con el tiempo. Teniendo en cuenta todo esto, parece claro que la estabilidad que se percibe en la superficie es solo un espejismo.
Esta semana, un equipo internacional de científicos ha presentado la última actualización del Modelo Magnético Mundial, de nombre WMM2020, y que sucede a otro modelo publicado en febrero de este año. El WMM es un conjunto de simulaciones que establecen y predicen el estado del campo magnético del planeta y que son elaboradas por la Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) y el British Geological Survey. Esta última entrega muestra que el polo norte magnético ha atravesado el meridiano de Greenwich y que se está desplazando hacia Siberia, después de dejar atrás Canadá, a una velocidad de unos 40 kilómetros por año.
Situación del polo norte magnético en 2020
El mapa de 2020 muestra la situación del polo norte magnético al noreste del meridiano de Greenwich. El modelo también muestra una «zona de apagón» alrededor de la cual las brújulas dejan de ser fiables y comienzan a fallar, a causa de la proximidad al polo norte.
Desde que los polos magnéticos fueron descubiertos en 1831, el polo norte se ha movido unos 2.250 kilómetros. Curiosamente, en los últimos 20 años, el polo norte se ha movido especialmente rápido, por causas que no se conocen: mientras que en el año 2000 se movía a unos 10 kilómetros por año, en las dos últimas décadas lo ha hecho a una velocidad media anual de 55 kilómetros.
A priori, estas variaciones no tienen ningún efecto que pueda percibirse a simple vista, más allá de que es necesario tenerlas en cuenta para calibrar los GPS o para renombrar algunas pistas de aeropuerto cuya designación depende de la orientación.
Lo interesante es que ahora mismo se desconoce si estos movimientos de los polos están relacionados con el debilitamiento que se está observando en el campo magnético del planeta, o si están anunciando una inversión magnética, en la que los polos norte y sur intercambiarán sus posiciones.
Los datos de las simulaciones han sido recogida por satélites y 160 puestos de observación terrestres. Los modelos se publican cada cinco años, pero en febrero de este año se decidió adelantar la actualización a causa de los rápidos cambios experimentados en el campo magnético. El modelo presentado esta semana describe cuál será la situación en 2020 si todo va como está previsto.
ABC
El interior de la Tierra está en constante movimiento. En lo más profundo existe una gigantesca esfera metálica, compuesta por una aleación de hierro y níquel. Está formada por un núcleo externo, que se encuentra en estado líquido y que alcanza un radio de casi 3.400 kilómetros. Dentro de él hay un núcleo interno, sólido y de unos 1.200 kilómetros de radio, que se cree que gira ligeramente más rápido que el resto del planeta (fenómeno que se conoce como superrotación). De hecho, se sospecha que los movimientos de ambas esferas generan el campo magnético de la Tierra. Estos también parecen ser los responsables de que los polos se muevan, de que se inviertan o de que la intensidad del campo magnético cambie con el tiempo. Teniendo en cuenta todo esto, parece claro que la estabilidad que se percibe en la superficie es solo un espejismo.
Esta semana, un equipo internacional de científicos ha presentado la última actualización del Modelo Magnético Mundial, de nombre WMM2020, y que sucede a otro modelo publicado en febrero de este año. El WMM es un conjunto de simulaciones que establecen y predicen el estado del campo magnético del planeta y que son elaboradas por la Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) y el British Geological Survey. Esta última entrega muestra que el polo norte magnético ha atravesado el meridiano de Greenwich y que se está desplazando hacia Siberia, después de dejar atrás Canadá, a una velocidad de unos 40 kilómetros por año.
Situación del polo norte magnético en 2020
El mapa de 2020 muestra la situación del polo norte magnético al noreste del meridiano de Greenwich. El modelo también muestra una «zona de apagón» alrededor de la cual las brújulas dejan de ser fiables y comienzan a fallar, a causa de la proximidad al polo norte.
Desde que los polos magnéticos fueron descubiertos en 1831, el polo norte se ha movido unos 2.250 kilómetros. Curiosamente, en los últimos 20 años, el polo norte se ha movido especialmente rápido, por causas que no se conocen: mientras que en el año 2000 se movía a unos 10 kilómetros por año, en las dos últimas décadas lo ha hecho a una velocidad media anual de 55 kilómetros.
A priori, estas variaciones no tienen ningún efecto que pueda percibirse a simple vista, más allá de que es necesario tenerlas en cuenta para calibrar los GPS o para renombrar algunas pistas de aeropuerto cuya designación depende de la orientación.
Lo interesante es que ahora mismo se desconoce si estos movimientos de los polos están relacionados con el debilitamiento que se está observando en el campo magnético del planeta, o si están anunciando una inversión magnética, en la que los polos norte y sur intercambiarán sus posiciones.
Los datos de las simulaciones han sido recogida por satélites y 160 puestos de observación terrestres. Los modelos se publican cada cinco años, pero en febrero de este año se decidió adelantar la actualización a causa de los rápidos cambios experimentados en el campo magnético. El modelo presentado esta semana describe cuál será la situación en 2020 si todo va como está previsto.
ABC
Ciencianauta- Cybernauta VIP
- Mensajes : 875
Popularidad : 4474
Reputación : 2335
Fecha de inscripción : 04/12/2012
Unas misteriosas «masas» subterráneas estarían provocando la migración del polo norte magnético hacia Siberia
El polo norte magnético está moviéndose de su tradicional hogar en el Ártico canadiense hacia Siberia. Ahora un nuevo estudio científico cree haber encontrado el porqué: una batalla de tira y afloja entre dos masas gigantes que se esconden en las profundidades de la Tierra, en la frontera entre el núcleo y el manto terrestre.
Estas masas, áreas de flujo magnético negativo bajo Canadá y Siberia, han estado compitiendo entre sí, cambiando de forma e intensidad magnética. Y al parecer ya hay una ganadora: de 1999 a 2019, mientras que la masa canadiense se debilitaba, la siberiana incrementó su fuerza levemente e inclinó la balanza hacia su lado.
«Juntos, estos cambios han causado que el polo norte magnético viaje hacia Siberia», dijo Phil Livermore, profesor asociado de geofísica de la Universidad de Leeds en el Reino Unido y autor principal del estudio. «Nunca antes habíamos visto algo como esto»
En octubre de 2017, el polo norte magnético cruzó la línea horaria internacional y entró al hemisferio oriental, pasando dentro de los 390 km del Polo Norte geográfico y luego dirigiéndose hacia el sur. El cambio fue tan rápido, que en 2019 los geólogos se vieron forzados a publicar un nuevo Modelo Magnético Mundial (un mapa que incluye todo, desde la navegación aérea hasta el GPS en los smartphones) con un año de antelación.
La celeridad de los hechos había desconcertado a los hombres de ciencia…. hasta ahora, cuando Livermore y sus colegas notaron que estas «masas subterráneas» eran, en gran parte, las responsables.
Asimismo, el campo magnético no está confinado al núcleo, líneas magnéticas sobresalen de él, siendo las masas gigantescas de Canadá y Siberia justamente los lugares por donde escapan. «Si imaginas estas líneas del campo magnético como pasta, entonces estos parches serían como trozos de espagueti saliéndose del plato», explicó Livermore.
Los investigadores descubrieron que de 1999 a 2019, la masa bajo Canadá se alargó de este a oeste y se dividió en dos masas más pequeñas enlazadas, posiblemente debido a un cambio de patrón en el flujo del núcleo entre 1970 y 1999. «Esta división causó que la masa canadiense se debilitara», se lee en el estudio, donde se agrega que una diferencia de intensidad entre ambas provocó que la más fuerte se acercara a y potenciara a la de Siberia.
No obstante, los autores aclaran que tanto la masa canadiense como la siberiana se hallan en un delicado balance, donde cualquier reajuste menor en la configuración actual podría revertir la actual tendencia del polo norte magnético y regresarlo hacia donde estaba antes.
«Aunque nuestras investigaciones indican que el polo magnético continuará su viaje hacia Siberia, pronosticar el futuro es algo desafiante y no podemos estar seguros», concluyó Livermore. El estudio detallando los hallazgos ha sido publicado en Nature Geoscience.
¡Asombroso!
Estas masas, áreas de flujo magnético negativo bajo Canadá y Siberia, han estado compitiendo entre sí, cambiando de forma e intensidad magnética. Y al parecer ya hay una ganadora: de 1999 a 2019, mientras que la masa canadiense se debilitaba, la siberiana incrementó su fuerza levemente e inclinó la balanza hacia su lado.
«Juntos, estos cambios han causado que el polo norte magnético viaje hacia Siberia», dijo Phil Livermore, profesor asociado de geofísica de la Universidad de Leeds en el Reino Unido y autor principal del estudio. «Nunca antes habíamos visto algo como esto»
Saltos hacia Siberia
Cuando los científicos ubicaron por primera vez el polo norte magnético (el punto hacia donde apunta la aguja de tu brújula) en 1831, se asentaba en Nunavut, en el norte del territorio canadiense. Pero pronto se dieron cuenta que no estaba fijo y era errático, si bien usualmente no se alejaba mucho de donde estaba. «Después, de 1990 a 2005, el polo magnético comenzó a saltar anualmente a una velocidad histórica, de 15 kilómetros a 60 km por año», escriben los investigadores.En octubre de 2017, el polo norte magnético cruzó la línea horaria internacional y entró al hemisferio oriental, pasando dentro de los 390 km del Polo Norte geográfico y luego dirigiéndose hacia el sur. El cambio fue tan rápido, que en 2019 los geólogos se vieron forzados a publicar un nuevo Modelo Magnético Mundial (un mapa que incluye todo, desde la navegación aérea hasta el GPS en los smartphones) con un año de antelación.
La celeridad de los hechos había desconcertado a los hombres de ciencia…. hasta ahora, cuando Livermore y sus colegas notaron que estas «masas subterráneas» eran, en gran parte, las responsables.
Masas cambiantes
El campo magnético terrestre es generado por el movimiento de aleaciones de hierro fundido en el núcleo externo del planeta. Y, como es de esperar, lo que suceda allí repercute en la ubicación del polo norte magnético.Asimismo, el campo magnético no está confinado al núcleo, líneas magnéticas sobresalen de él, siendo las masas gigantescas de Canadá y Siberia justamente los lugares por donde escapan. «Si imaginas estas líneas del campo magnético como pasta, entonces estos parches serían como trozos de espagueti saliéndose del plato», explicó Livermore.
Los investigadores descubrieron que de 1999 a 2019, la masa bajo Canadá se alargó de este a oeste y se dividió en dos masas más pequeñas enlazadas, posiblemente debido a un cambio de patrón en el flujo del núcleo entre 1970 y 1999. «Esta división causó que la masa canadiense se debilitara», se lee en el estudio, donde se agrega que una diferencia de intensidad entre ambas provocó que la más fuerte se acercara a y potenciara a la de Siberia.
No obstante, los autores aclaran que tanto la masa canadiense como la siberiana se hallan en un delicado balance, donde cualquier reajuste menor en la configuración actual podría revertir la actual tendencia del polo norte magnético y regresarlo hacia donde estaba antes.
«Aunque nuestras investigaciones indican que el polo magnético continuará su viaje hacia Siberia, pronosticar el futuro es algo desafiante y no podemos estar seguros», concluyó Livermore. El estudio detallando los hallazgos ha sido publicado en Nature Geoscience.
¡Asombroso!
Asombroso- Cybernauta VIP
- Mensajes : 1210
Popularidad : 5663
Reputación : 3209
Fecha de inscripción : 07/12/2012
El Polo Norte se sigue moviendo y ya ha atravesado el meridiano de Greenwich
El interior de la Tierra está en constante movimiento
Desde que los polos magnéticos fueron descubiertos en 1831, el Polo Norte se ha movido unos 2.250 kilómetros
Un equipo internacional de científicos ha presentado la última actualización del Modelo Magnético Mundial, de nombre WMM2020.
El WMM es un conjunto de simulaciones que establecen y predicen el estado del campo magnético del planeta y que son elaboradas por la Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) y el British Geological Survey.
Esta entrega muestra que el Polo Norte magnético ha atravesado el meridiano de Greenwich y que se está desplazando hacia Siberia, después de dejar atrás Canadá, a una velocidad de unos 40 kilómetros por año. En lo más profundo existe una gigantesca esfera metálica, compuesta por una aleación de hierro y níquel.
Está formada por un núcleo externo, que se encuentra en estado líquido y que alcanza un radio de casi 3.400 kilómetros.
Dentro de él hay un núcleo interno, sólido y de unos 1.200 kilómetros de radio, que se cree que gira ligeramente más rápido que el resto del planeta (fenómeno que se conoce como superrotación).
De hecho, se sospecha que los movimientos de ambas esferas generan el campo magnético de la Tierra.
Estos también parecen ser los responsables de que los polos se muevan, de que se inviertan o de que la intensidad del campo magnético cambie con el tiempo. Teniendo en cuenta todo esto, parece claro que la estabilidad que se percibe en la superficie es solo un espejismo.
El mapa de 2020 muestra la situación del polo norte magnético al noreste del meridiano de Greenwich.
El modelo también muestra una «zona de apagón» alrededor de la cual las brújulas dejan de ser fiables y comienzan a fallar, a causa de la proximidad al polo norte.
Desde que los polos magnéticos fueron descubiertos en 1831, el Polo Norte se ha movido unos 2.250 kilómetros.
Curiosamente, en los últimos 20 años, el polo norte se ha movido especialmente rápido, por causas que no se conocen: mientras que en el año 2000 se movía a unos 10 kilómetros por año, en las dos últimas décadas lo ha hecho a una velocidad media anual de 55 kilómetros.
A priori, estas variaciones no tienen ningún efecto que pueda percibirse a simple vista, más allá de que es necesario tenerlas en cuenta para calibrar los GPS o para renombrar algunas pistas de aeropuerto cuya designación depende de la orientación.
Lo interesante es que ahora mismo se desconoce si estos movimientos de los polos están relacionados con el debilitamiento que se está observando en el campo magnético del planeta, o si están anunciando una inversión magnética, en la que los polos norte y sur intercambiarán sus posiciones.
Los datos de las simulaciones han sido recogida por satélites y 160 puestos de observación terrestres.
Los modelos se publican cada cinco años, pero en febrero de este año se decidió adelantar la actualización a causa de los rápidos cambios experimentados en el campo magnético. El modelo presentado esta semana describe cuál será la situación en 2020 si todo va como está previsto.
Desde que los polos magnéticos fueron descubiertos en 1831, el Polo Norte se ha movido unos 2.250 kilómetros
Un equipo internacional de científicos ha presentado la última actualización del Modelo Magnético Mundial, de nombre WMM2020.
El WMM es un conjunto de simulaciones que establecen y predicen el estado del campo magnético del planeta y que son elaboradas por la Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) y el British Geological Survey.
Esta entrega muestra que el Polo Norte magnético ha atravesado el meridiano de Greenwich y que se está desplazando hacia Siberia, después de dejar atrás Canadá, a una velocidad de unos 40 kilómetros por año. En lo más profundo existe una gigantesca esfera metálica, compuesta por una aleación de hierro y níquel.
Está formada por un núcleo externo, que se encuentra en estado líquido y que alcanza un radio de casi 3.400 kilómetros.
Dentro de él hay un núcleo interno, sólido y de unos 1.200 kilómetros de radio, que se cree que gira ligeramente más rápido que el resto del planeta (fenómeno que se conoce como superrotación).
De hecho, se sospecha que los movimientos de ambas esferas generan el campo magnético de la Tierra.
Estos también parecen ser los responsables de que los polos se muevan, de que se inviertan o de que la intensidad del campo magnético cambie con el tiempo. Teniendo en cuenta todo esto, parece claro que la estabilidad que se percibe en la superficie es solo un espejismo.
El mapa de 2020 muestra la situación del polo norte magnético al noreste del meridiano de Greenwich.
El modelo también muestra una «zona de apagón» alrededor de la cual las brújulas dejan de ser fiables y comienzan a fallar, a causa de la proximidad al polo norte.
Desde que los polos magnéticos fueron descubiertos en 1831, el Polo Norte se ha movido unos 2.250 kilómetros.
Curiosamente, en los últimos 20 años, el polo norte se ha movido especialmente rápido, por causas que no se conocen: mientras que en el año 2000 se movía a unos 10 kilómetros por año, en las dos últimas décadas lo ha hecho a una velocidad media anual de 55 kilómetros.
A priori, estas variaciones no tienen ningún efecto que pueda percibirse a simple vista, más allá de que es necesario tenerlas en cuenta para calibrar los GPS o para renombrar algunas pistas de aeropuerto cuya designación depende de la orientación.
Lo interesante es que ahora mismo se desconoce si estos movimientos de los polos están relacionados con el debilitamiento que se está observando en el campo magnético del planeta, o si están anunciando una inversión magnética, en la que los polos norte y sur intercambiarán sus posiciones.
Los datos de las simulaciones han sido recogida por satélites y 160 puestos de observación terrestres.
Los modelos se publican cada cinco años, pero en febrero de este año se decidió adelantar la actualización a causa de los rápidos cambios experimentados en el campo magnético. El modelo presentado esta semana describe cuál será la situación en 2020 si todo va como está previsto.
Cybernauta- Co-Administrador
- Mensajes : 1394
Popularidad : 5233
Reputación : 2799
Fecha de inscripción : 24/11/2012
El polo norte se está moviendo muy rápido, y eso ha obligado a muchos aeropuertos a renombrar sus pistas
>>El movimiento del núcleo de la Tierra ha acelerado el desplazamiento de los polos magnéticos
>>El polo norte magnético se desplaza 50 km al año
Las pistas de los aeropuertos se numeran según su orientación magnética, pero el polo norte de la Tierra se está desplazando tan rápidamente que aeropuertos de todo el mundo se han visto obligados a renombrarlas con más frecuencia.
Las pistas de los aeropuertos están orientadas en las direcciones predominantes del viento. Cada extremo de una pista se numera según el rumbo magnético que deben seguir los pilotos para aterrizar.
Si un piloto vuela hacia el este, su rumbo es de 90 grados. Si vuela hacia el oeste, su rumbo es de 270 grados.
En una pista, los extremos se numeran según su orientación magnética medida en grados, pero redondeada y dividida por diez para simplificar.
Una pista de orientación este-oeste tiene un extremo orientado hacia los 90 grados magnéticos con la designación 09. El extremo opuesto, orientado hacia los 270 grados magnéticos, se denomina 27.
Si el aeropuerto cuenta con pistas paralelas, el código tiene designaciones adicionales como "L" (Left), "R" (Right) y “C” (Center).
Por ejemplo, el Aeropuerto de Madrid-Barajas cuenta con dos pares de pistas paralelas que se intercambian la designación L y R dependiendo de la configuración del viento.
Las pistas 14L/32R y 14R/32L están orientadas aproximadamente en la dirección noreste-suroeste:
Extremo 14L/R: orientación magnética aproximada de 140 grados
Extremo 32R/L: orientación magnética aproximada de 320 grados
Las pistas 18L/36R y 18R/36L están orientadas aproximadamente en la dirección norte-sur:
Extremo 18L/R: orientación magnética aproximada de 180 grados
Extremo 36R/L: orientación magnética aproximada de 360 grados
El norte se corresponde siempre con las pistas 36 (de 360 grados). La numeración 00 (que sería una orientación equivalente de 0 grados) no se usa.
Los aviones usan brújulas que apuntan hacia el polo norte magnético en lugar del norte geográfico o auténtico. El problema es que los polos magnéticos no están fijos, sino que se van desplazando con los movimientos del hierro y el níquel en el núcleo de la Tierra.
Este movimiento se ha acelerado significativamente desde los años 90, con desplazamientos de más de 50 kilómetros al año.
La rápida distorsión entre el polo magnético y el geográfico puede ser un quebradero de cabeza para pilotos y controladores aéreos, que deben ajustar sus rumbos de acuerdo con esta diferencia.
Para ello, tienen en cuenta el lugar del planeta en el que se encuentran y aplican lo que llaman la declinación magnética, que es un valor único en cada punto de la Tierra definido como la diferencia en grados entre el polo norte verdadero y el polo norte magnético.
Debido a este desplazamiento, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) revisa periódicamente las pistas de todos los aeropuertos del mundo para decidir si es necesario un cambio de numeración.
Por ejemplo, el Aeropuerto de Barcelona tuvo que repintar y cambiar los carteles de sus pistas 07L/25R y 07R/25L en marzo de 2022 para renumerarlas como 06L/24R y 06R/24L, respectivamente.
La declinación magnética cambia continuamente y se aplica a todos los aeropuertos del planeta, no solo a unos pocos.
Sin embargo, los aeropuertos más cercanos a los polos tienen los casos más aberrantes, en los que una pista orientada hacia el norte geográfico puede tener el código 09 porque su orientación magnética es de 90 grados. Es decir, un piloto que aterriza cerca del Ártico puede tener el norte geográfico enfrente y el magnético a la derecha.
Por eso algunos aeropuertos en Canadá usan el norte geográfico para minimizar el impacto del desplazamiento del polo norte magnético, algo que hoy en día es factible gracias a los sistemas GPS modernos.
Lo dice la ciencia.
>>El polo norte magnético se desplaza 50 km al año
Las pistas de los aeropuertos se numeran según su orientación magnética, pero el polo norte de la Tierra se está desplazando tan rápidamente que aeropuertos de todo el mundo se han visto obligados a renombrarlas con más frecuencia.
Cómo se numeran las pistas de los aeropuertos
Las pistas de los aeropuertos están orientadas en las direcciones predominantes del viento. Cada extremo de una pista se numera según el rumbo magnético que deben seguir los pilotos para aterrizar.
Si un piloto vuela hacia el este, su rumbo es de 90 grados. Si vuela hacia el oeste, su rumbo es de 270 grados.
En una pista, los extremos se numeran según su orientación magnética medida en grados, pero redondeada y dividida por diez para simplificar.
Una pista de orientación este-oeste tiene un extremo orientado hacia los 90 grados magnéticos con la designación 09. El extremo opuesto, orientado hacia los 270 grados magnéticos, se denomina 27.
Si el aeropuerto cuenta con pistas paralelas, el código tiene designaciones adicionales como "L" (Left), "R" (Right) y “C” (Center).
Por ejemplo, el Aeropuerto de Madrid-Barajas cuenta con dos pares de pistas paralelas que se intercambian la designación L y R dependiendo de la configuración del viento.
Las pistas 14L/32R y 14R/32L están orientadas aproximadamente en la dirección noreste-suroeste:
Extremo 14L/R: orientación magnética aproximada de 140 grados
Extremo 32R/L: orientación magnética aproximada de 320 grados
Las pistas 18L/36R y 18R/36L están orientadas aproximadamente en la dirección norte-sur:
Extremo 18L/R: orientación magnética aproximada de 180 grados
Extremo 36R/L: orientación magnética aproximada de 360 grados
El norte se corresponde siempre con las pistas 36 (de 360 grados). La numeración 00 (que sería una orientación equivalente de 0 grados) no se usa.
Problema: el norte magnético se está desplazando rápidamente
Los aviones usan brújulas que apuntan hacia el polo norte magnético en lugar del norte geográfico o auténtico. El problema es que los polos magnéticos no están fijos, sino que se van desplazando con los movimientos del hierro y el níquel en el núcleo de la Tierra.
Este movimiento se ha acelerado significativamente desde los años 90, con desplazamientos de más de 50 kilómetros al año.
La rápida distorsión entre el polo magnético y el geográfico puede ser un quebradero de cabeza para pilotos y controladores aéreos, que deben ajustar sus rumbos de acuerdo con esta diferencia.
Para ello, tienen en cuenta el lugar del planeta en el que se encuentran y aplican lo que llaman la declinación magnética, que es un valor único en cada punto de la Tierra definido como la diferencia en grados entre el polo norte verdadero y el polo norte magnético.
Debido a este desplazamiento, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) revisa periódicamente las pistas de todos los aeropuertos del mundo para decidir si es necesario un cambio de numeración.
Por ejemplo, el Aeropuerto de Barcelona tuvo que repintar y cambiar los carteles de sus pistas 07L/25R y 07R/25L en marzo de 2022 para renumerarlas como 06L/24R y 06R/24L, respectivamente.
La declinación magnética cambia continuamente y se aplica a todos los aeropuertos del planeta, no solo a unos pocos.
Sin embargo, los aeropuertos más cercanos a los polos tienen los casos más aberrantes, en los que una pista orientada hacia el norte geográfico puede tener el código 09 porque su orientación magnética es de 90 grados. Es decir, un piloto que aterriza cerca del Ártico puede tener el norte geográfico enfrente y el magnético a la derecha.
Por eso algunos aeropuertos en Canadá usan el norte geográfico para minimizar el impacto del desplazamiento del polo norte magnético, algo que hoy en día es factible gracias a los sistemas GPS modernos.
Lo dice la ciencia.
Ciencianauta- Cybernauta VIP
- Mensajes : 875
Popularidad : 4474
Reputación : 2335
Fecha de inscripción : 04/12/2012
Contenido patrocinado
Temas similares
» Un esquimal orinando funde un tercio del Polo Norte
» La Siberia española que pocos conocen: temperaturas del Polo Norte y decenas de pueblos congelados
» LA TIERRA NO SE ESTA MOVIENDO!
» La Tierra se está moviendo a través de una nube radiactiva
» Un agujero gigante en el polo sur de Marte desconcierta a los científicos
» La Siberia española que pocos conocen: temperaturas del Polo Norte y decenas de pueblos congelados
» LA TIERRA NO SE ESTA MOVIENDO!
» La Tierra se está moviendo a través de una nube radiactiva
» Un agujero gigante en el polo sur de Marte desconcierta a los científicos
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.