Andalucía despierta el apetito en Reino Unido: 7 de cada 10 euros de inversión extranjera fueron británicos

La comunidad fue el destino de 1.264 millones en 2022, lo que significa un 30% más que el año anterior

El caudal de la inversión extranjera que recibe Andalucía creció como nunca durante el año pasado. Cada día de 2022 llegaron a la comunidad autónoma casi 3,5 millones de euros hasta sumar, al final del ejercicio, 1.264,9 millones de euros, la cifra más alta de la serie histórica, que se remonta a 1993.


Un británico se manifiesta contra el Brexit en Málaga en una imagen de archivo con banderas de España y del Reino Unido.

Con relación al año anterior, el 2021, la inversión extranjera creció un 30,3%, desde los 970 millones, mientras que en el conjunto de España ese incremento fue del 13,9%, pasando de 29.998 millones de euros a los 34.178 millones.

El gran culpable de estos datos fue Reino Unido, que tras superar los baches del Brexit parece tener un apetito inversor voraz por Andalucía. Hasta el extremo de que, según los datos del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, casi siete de cada diez euros extranjeros que recibió la comunidad en inversiones el año pasado fueron de origen británico.

Las inversiones procedentes del ex socio europeo alcanzaron en 2022 los 846 millones de euros, lo que representa el 66,9% del total, convirtiendo a Reino Unido en el principal inversor extranjero en la comunidad, a mucha distancia del segundo, que fue Países Bajos, con 106 millones, o Luxemburgo, con 53 millones.

El dato de la inversión británica es aún más llamativo cuando se compara con el de años anteriores. En 2021, Andalucía recibió de ese país 27,6 millones, es decir, 30 veces menos, y en los años anteriores fueron cantidades similares: 39 millones en 2020 y 37 millones en 2019.

La mayor parte de todo ese dinero aterrizó en el primer trimestre de 2022, que fue histórico. Solamente en esos tres meses, se realizaron inversiones desde fuera de España por un importe de 937,8 millones, casi la misma cantidad que llegó en todo el año 2021. En el segundo trimestre, la inversión extranjera se frenó en seco, hasta los 88 millones de euros, y recuperó algo de ritmo en el tercero, con 106 millones de euros, y un poco más en el último, con 131 millones de euros.

El incremento es aún mayor si se examinan los últimos cuatro años. Entre 2019 y 2022, la cuantía total que atrajo Andalucía ascendió a 3.856 millones de euros, casi el doble que los cuatro años anteriores y entre el último año de gobierno del PSOE, 2018, y el último del PP, 2022, la inversión extranjera casi se ha triplicado, desde los 460 millones a los 1.264,9 millones del año pasado.

Se podría decir que mientras en todo el país la inversión extranjera metía una marcha más, en Andalucía metía dos, aunque eso no es todavía suficiente para que la región se coloque entre los primeros puestos del ránking nacional, que Madrid sigue encabezando y a gran distancia, seguida del País Vasco, Cataluña y Valencia.

Andalucía se queda así en el quinto puesto, cuando en 2021 ocupaba el cuarto. Pero si en Andalucía se disparó la inversión extranjera el año pasado, en Valencia se disparo todavía más. De hecho, pasó de los 867 millones de euros a superar los 2.000, en concreto hasta los 2.036 millones de euros, un crecimiento exponencial que le ha servido para desbancar a la comunidad andaluza.

Alcanzar a Madrid en inversión extranjera sigue siendo una utopía a día de hoy, y pese a la velocidad que se registra en los últimos años en Andalucía. En 2022, la comunidad madrileña captó 17.225 millones en inversión foránea, lo que represente trece veces más que el mejor dato andaluz. También se mantiene una gran distancia con el segundo imán de inversión extranjera, el País Vasco, que atrajo proyectos por un valor de 5.515 millones de euros, o Cataluña, que aún triplica las cifras andaluzas.

En estos últimos años no han sido pocas los gigantes, sobre todo tecnológicos, que han puesto proa al sur. El listado es largo e incluye a Google -con su centro de ciberseguridad- o Vodafone, ambas en Málaga, además de otros menos conocidos, como la estadounidense Solera, que ha creado 400 empleos en Sevilla en un solo año. Claro que la mayoría ni son tan grandes ni son tan habituales en la prensa. Pero todo suma.

Como también hay que tener en cuenta otro indicador de la inversión extranjera que destaca la Consejería de Economía, el del stock de inmovilizado material en el territorio, un concepto que abarca terrenos, edificios, sedes, cadenas de montaje, maquinaria, transporte, etcétera que una empresa dedica al desarrollo de su actividad y que, a diferencia de la inversión extranjera productiva de una empresa con sede fuera de Andalucía, sí computa en la comunidad en la que se encuentra.

Con los últimos datos disponibles, señala la Junta, los de 2020, el inmovilizado material de las empresas extranjeras en España es de 138.340 millones de euros y en Andalucía es de 19.824 millones, el 14,3% del total. Teniendo en consideración este indicador, la comunidad andaluza ocuparía el tercer lugar, solo después de Madrid, que concentra el 20,9%, y Cataluña, con el 20,3%.

Desde el Gobierno andaluz de Juanma Moreno se apuntan, como razones detrás de este éxito, a las sucesivas rebajas fiscales, a la simplificación de trámites administrativos o a iniciativas como la unidad aceleradora de proyectos, aunque por encima de todas estaría la absoluta "disponibilidad" del ejecutivo para atender a las empresas con herramientas como la unidad de captación de inversiones, que existe desde hace años, pero a la que se le ha dado un impulso definitivo.
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