Casi la mitad de los británicos se plantea abandonar el país al verlo convertido en un estercolero multicultural

El pasado sábado, un autocar en el que viajaban 40 miembros de la Liga de Defensa Inglesa, (EDL) fue apedreado por aproximadamente un centenar de “asiáticos” en un conflictivo distrito londinense. La policía, detuvo a todos los integrantes agredidos del EDL

Según la BBC, unos 100 jóvenes “asiáticos” (musulmanes) lanzaron piedras y ladrillos contra el autocar cuando se detuvo en una calle de Tower Hamlets, zona donde se concentra una nutrida comunidad mahometana y el fanático Anjem Choudary ejerce de “emir” de los creyentes. Los miembros del EDL, que regresaban de la localidad de Aldgate donde se había celebrado un acto de protesta contra el totalitarismo islámico, fueron detenidos por “alterar el orden público”, pase a que habían sido víctimas de un violento ataque multicultural. “Lapidados” por musulmanes del lugar y detenidos, posteriormente, por la policía… todo un éxito del multiculturalismo europeo.

Pero, la Liga de Defensa Inglesa no sólo tiene que hacer frente a la cólera de los seguidores del Profeta, sino también a los extravíos “políticamente correctos” de políticos y sindicalistas. Por ejemplo, cuando pidió autorización para manifestarse en Tower Hamlets, el sindicato de transportes amenazó con una huelga y la Autoridad, siempre muy sensible en lo que al multiculturalismo respecta, negó que los EDL tuvieran derecho a manifestarse en un distrito, al parecer, sometido al islam.

Towers Hamlets, es un pintoresco barrio londinense en el que el “radical” Choudary ha decretado zonas libres de homosexuales, bebedores de cerveza, fumadores y señoritas descocadas que omiten el uso del niqab. Sin embargo, las autoridades que no encuentran indicios de delito en las coacciones y amenazas ejercidas por el “radical”, sí consideran razonable y justo detener a 40 pasajeros de un autocar apedreado por furiosos “creyentes” de Alá LA EUROPA MULTICULTURAL

De la manera en que sólo una adolescente podría, la muchacha estaba sola en el mundo: sin amigos, sin novio, con una precaria relación con sus padres. Por eso, se sintió especial cuando un hombre decenas de años mayor que ella le prestó atención, le compró chucherías y le dio alcohol gratis.

Luego la llevó a un cuartucho arriba de un local de kebabs y le dijo que tenía que darle algo a cambio. Sus demandas crecieron: no sólo sexo con él, también con sus amigos. Así se prolongó durante años la situación, hasta que la policía acusó a nueve hombres de dirigir una red sexual con niñas menores de edad.

La historia de la Chica A, como se le conoció en la corte, es cuando menos trágica, pero también se ha vuelto explosiva. Las chicas son blancas y los hombres que los usan como juguetes sexuales son asiáticos musulmanes, en su mayoría paquistaníes criados en Gran Bretaña. Y no sólo se trata de Rochdale: alrededor de una decena de otros casos de musulmanes asiáticos acusados de seducir mujeres jóvenes blancas para tener relaciones sexuales están lentamente entrando en juicios en el norte de Inglaterra, involucrando hasta cientos de jovencitas en total.

En la Gran Bretaña actual, que se enorgullece de ser una sociedad tolerante e integrada, el caso le ha desgarrado el velo para exponer las llagas raciales que yacen debajo. También alimenta una ya fuerte ira en contra de la minoría musulmana asiática en el país, en un movimiento dirigido por los grupos de extrema derecha en un momento en que la economía está estancada.

“Uno no puede ignorar el aspecto racial”, dijo el fiscal Nazir Afzal, un musulmán británico con raíces en Pakistán que terminó varios años de indiferencia oficial ante la difícil situación de las niñas y, finalmente, llevó a juicio a los responsables. “Es el elefante en la habitación”.

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A la distancia, Rochdale parece como una perfecta ciudad inglesa, con la iglesia parroquial de 800 años de St. Chad que mira desde arriba las calles y el ayuntamiento victoriano gótico que yace abajo, su torre de reloj que rememora la londinense que alberga al Big Ben.

De cerca se ven más claramente los defectos. Como los dientes faltantes en las que algún día fueron sonrisas resplandecientes, un importante número de los locales en el centro están tapiados o se han convertido en casas de empeño o tiendas en las que casi todo se puede comprar por una libra (1,60 dólares) o menos.

La comunidad paquistaní empezó a crecer hace medio siglo, cuando las fábricas de tejido de algodón empezaron a florecer en el pueblo. Los recién llegados, la mayoría de ellos procedentes de poblados rurales pobres, fueron atraídos por la promesa de trabajos estables y la oportunidad para educar a sus hijos en las escuelas inglesas.

Una cantidad de mezquitas empezaron a formar parte del escenario, particularmente la Mezquita Dorada, ganadora de varios premios de diseño. Actualmente, los hombres barbados musulmanes con tocados decorados y mujeres en batas negras y velos son una presencia constante en las calles del centro de la ciudad.

Casi un millón de paquistaníes viven en Inglaterra —mucho más que en cualquier otro país europeo— con unos 25.000 establecidos en la zona urbana de Manchester, que incluye Rochdale. La comisión de igualdad del gobierno reportó que más de la mitad de los paquistaníes en la Gran Bretaña viven en la pobreza, mucho más que la población general, con poco menos del 75% sin ahorro formal.

Enfrentan tiempos duros actualmente. Los locales cerrados son señales de una profunda recesión que ha golpeado el norte de Inglaterra más que en el sur, que incluye Londres, con su distrito financiero y los suburbios acaudalados.

Las fábricas de algodón tienen mucho tiempo cerradas, los heraldos del periódico local son pesimistas y fatalistas: Se triplica el número de indigentes, fuerte incremento del desempleo juvenil, más personas ayuda de vivienda.

Incluso el McDonald’s local, mucho tiempo referente en el centro de la ciudad, se mudó.

Fue en este ambiente en que la chica A perdió el control una noche del verano de 2008.

Luego de beber demasiado alcohol, la joven de 15 años fue al local de kebabs en la vecina Heywood, donde conoció por primera vez a su “novio”. Empezó a gritar y a despedazar el lugar. Cuando llamaron a la policía, ella les dijo que había sido violada en repetidas ocasiones y mostró su ropa manchada de semen como prueba.

Los detectives de la policía de Manchester concluyeron que la joven, que era menor de la edad requerida para dar consentimiento, decía la verdad, pero la fiscalía recomendó no presentar cargos criminales porque el jurado podría no darle credibilidad a una joven perturbada, con problemas de alcoholismo y una vida sexual activa. El caso fue desestimado discretamente luego de 11 meses de investigaciones.

El abuso se intensificó. La red de predadores creció; el círculo de víctimas se ensanchó. En un momento, llegó a haber al menos 47 víctimas o testigos.

La joven fue sacada de noche, forzada a tener relaciones sexuales con más y más hombres, en ocasiones hasta cinco al día, en los coches o trastiendas de restaurantes o en departamentos sucios. Los hombres la amenazaban si se quejaba. No parecía haber escapatoria alguna.

Estaba atrapada en un mundo secreto de actos sexuales que tenían lugar a altas horas de la noche, cuando la mayoría de la gente en Rochdale estaba guarecida en sus hogares.

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Los hombres de Rochdale no encajan con el perfil típico de los abusadores sexuales británicos —la mayoría de los crímenes de pedofilia son cometidos por hombres blancos que buscan niños y niñas a través de internet. Sin embargo, hay un consenso entre la fiscalía, policía, trabajadores sociales y políticos de que este abuso callejero, que ocurre en Rochdale, es en buena medida dominado por hombres asiáticos.

Ella Cockbain, especialista de ciencia criminal en el College of London, dijo que investigaciones muestran que en su mayoría hombres asiáticos conforman estos grandes grupos de abusadores que trabajan juntos. Escogió sus palabras cuidadosamente porque el tamaño de la muestra es pequeño y es un tema sensible.

“Hay, en definitiva, patrones surgidos que sería tonto ignorar”, agregó.

Mohammed Shafiq, un paquistaní británico que dirige la Fundación Ramadhan en Rochdale, ha molestado a algunas personas en su propia comunidad al sugerir que la policía no había actuado más agresivamente por temor de parecer racista debido a una obsesión “con la doctrina de lo políticamente correcto”.

Shafiq dijo que una “pequeña minoría” de hombres paquistaníes sienten que las jóvenes blancas no valen y son inmorales, y que se puede abusar de ellas impunemente.

“Ellos saben que si cogen a alguien de la comunidad asiática, rápidamente se darán cuenta”, agrega. “Pero esas chicas blancas están disponibles, por lo que piensan que pueden salirse con la suya”.

Los hombres en la red sexual de Rochdale eran llamativos sólo por ser ordinarios. Eran parte de la vida británica, pero en los márgenes, el tipo de personas que los viejos británicos no notan cuando pasan junto a ellos.

Muchos eran taxistas, acostumbrados a trabajar toda la noche con mucho tiempo entre viajes, y que frecuentaban los locales de kebabs para llevar que ofrecen platillos familiares de cordero, pollo y falafel. Sus taxis estaban afuera de estos locales, que eran los únicos que seguían abiertos luego del cierre de los bares.

La mayoría eran paquistaníes de primera o segunda generación criados generalmente en Gran Bretaña. Solo uno tenía antecedentes policiales por delitos sexuales. Había sido acusado de violar reiteradamente a una menor.

Algunos tenían familias y pequeños negocios. Ninguno era rico, pero tampoco extremadamente pobre.

Once individuos fueron juzgados recientemente en conexión con un caso y nueve fueron hallados culpables de violaciones.

La sociedad, mientras tanto, se polarizó. Los paquistaníes se sienten estigmatizados.

“Dicen que son buenos musulmanes, pero no lo son”, se quejó Irfan Chishti, que dirige un programa educativo en una mezquita de Rochdale. “Este es un gran pecado en el Islam. Si la ley sharia (islámica) estuviese vigente, recibirían un castigo muy duro”.

La muchacha que hizo la primera denuncia de abusos, quien hoy tiene 19 años, se fue a otra ciudad. En una entrevista a un grupo de periodistas se negó a calificar los abusos de actos de racismo y dijo que la asombró ver las cosas que hacían los musulmanes.

Afirmó que cuando empezó todo, en el 2008, no sabía que tantos musulmanes se aprovechaban de muchachas blancas.

“Esto sucede por todos lados ahora”, expresó. “Piensas que son gente religiosa, apegada a la familia, buena gente. No te imaginas que hacen cosas como estas”.

Indicó que cuando comenzaron los abusos, se sintió furiosa y avergonzada, y que luego se resignó.

“Después de cierto tiempo, había estado con tantos hombres que ya no sentía nada”, declaró. Era algo que tenía que hacer. Cuando caes en eso, te sientes atrapada. Creo que lo que me hicieron fue perverso”.

ASI ES EL ISLÁM

Los parlamentarios Frank Field (laborista) y Nicholas Soames (conservador) están convencidos: pueden decir adios al país que han conocido “si la inmigración no se reduce a la cuarta parte actual”. Los dos diputados piden al gobierno que disminuya de manera urgente el saldo migratorio (la diferencia entre las entradas y salidas de inmigrantes) para dejarlo en 50.000 al año. El saldo migratorio del año 2011 fue de 216.000 y en 2010 de 252.000.

“Es realmente la última oportunidad para nuestro país. Si el gobierno no apoya nuestra propuesta de reforma, entonces podremos decir adíos al país que hemos heredado”, han dicho los parlamentarios.

Más de 143.000 británicos han firmado ya una petición en línea en la página web de Downing Street para apoyar esta propuesta lanzada por Migration Watch. En menos de una semana ha alcanzado el umbral de las 100.00 firmas necesarias para abrir un debate parlamentario. Si no se toman medidas, la población de Gran Bretaña podría pasar de los actuales 62 millones de habitantes a unos 75 millones de aquí a 15 años.

El ministro de la Inmigración, Mark Harper, se ha declarado “impaciente” por iniciar ese debate en el que explicará en detalles “el compromiso del gobierno de llevar la inmigración a niveles sostenibles”. Según él, “reducir la inmigración neta a algunas decenas de miles al año es de una importancia vital”.

http://www.alertadigital.com/2012/09/25/dos-diputados-britanicos-dan-la-voz-de-alarma-y-alertan-de-que-gran-bretana-podria-desaparecer-si-no-se-reduce-el-numero-de-inmigrantes/

“¡No eres británica, eres negra!”. Una mujer de 34 años fue arrestada el domingo en Londres después de pronunciar esta frase en el tranvía de la capital de Reino Unido y de que trascendiera tras ser colgada en internet.

La detenida, que sostiene a su hijo mientras se dirige a una mujer negra en el Tram londinense, se lamenta primero del deterioro que sufre su país como consecuencia de la presencia de millones de extranjeros, hecho comprensible para cualquiera que haya viajado en los transportes públicos londidenses y comprobado la acumulación de basura que hay en ellos como consecuencia del incivismo de muchos viajeros no británicos.

“¿En qué se ha convertido este país…? En un montón de negros y polacos. No sois ingleses, ninguno de vosotros sois ingleses. ¿sabéis qué? Volved de donde coño hayáis salido”, espetó la mujer.

Y prosigue: “Volved a vuestro país. No vengáis al mío. Gran Bretaña no es nada ahora, Gran Bretaña está jodida”. Entonces, uno de los pasajeros le pide que modere su lenguaje porque hay niños. “Tengo a un niño aquí”, le dice la mujer.

El incidente tuvo lugar entre las estaciones de Croydon y Wimbeldon de este servicio de transporte urbano londinense. Los agentes de seguridad del metro londinense, en su mayoría inmigrantes, dicen: “No toleraremos ningún tipo de racismo en la red de metro y haremos todo lo posible para localizar a la persona responsable”.

http://www.alertadigital.com/2011/11/29/el-disparate-se-instala-en-europa-detenida-una-mujer-en-el-reino-unido-por-llamar-negra-a-una-negra/

Impactantes imágenes procedentes de un vídeo de seguridad han sido dadas a conocer en las últimas horas. En ellas se muestra cómo un pensionista británico sufre una brutal una patada de kárate en la espalda por parte de un individuo de raza negra, mientras un segundo continuó golpeando al anciano cuando éste se encontraba tendido en el suelo y en estado de semiinconsciencia. Ninguna organización antirracista del Reino Unido ha condenado el brutal ataque.
Vídeo

Los hechos tuvieron lugar en la estación de autobuses de la ciudad de Wolverhampton. El matón, que fue descrito como un hombre negro, de unos 20 años de edad y complexión musculosa, portaba una camiseta negra con la palabra “Nerd” escrita en ella. Le acompañaba otro hombre de raza negra y con un corte de pelo estilo afro.

“El vídeo muestra cómo el anciano habla con algunas personas en la estación. Poco después es pateado y cuando se encontraba boca abajo, el segundo joven saltó sobre su pecho. Ambos atacantes huyeron a continuación, dejando a la víctima inconsciente en el suelo. Algunos testigos llamaron a una ambulancia. Se trara de un ataque repugnante y cobarde”, señaló el sargento Adrian Brown, de la Policía de Wolverhampton.

La mayoría de los medios informativos británicos han ignorado este suceso. Link

Durante la última década, Arabia Saudí ha sido la mayor fuente de donaciones de los estados islámicos, así como el de las mayores aportaciones monetarias por parte de las familias reales a la universidades británicas. Gran parte de esta financiación se destina al estudio del Islam, Oriente Medio y a la literatura Árabe.

Una parte de este dinero fue a parar a los establecimientos de estudio de centros islámicos. En el 2008, el príncipe Alwaleed bin Talal donó 8 millones de euros a universidades de Cambridge y a Edimburgo, para este propósito.

La universidad de Oxford ha sido el mayor beneficiario de la ayuda saudita. En el año 2005, el difunto principe llamado Sultan, dio 2 millones euros al Museo Ashmolean. En el 2001, el rey Abdul Aziz dono un millón de euros para la fundación del centro de Medio Oriente.

Hay otros muchos donantes que financian a las universidades británicas. El sultán de Omán, Qaboos bin Said, donó 3,1 millones euros a Cambridge para financiar dos puestos, incluyendo el de un catedrático de árabe.

Según indica el blog EuropaHoy, la mayor donación conjunta que se conoce por el momento, fueron los 75 millones de euros que se les dio a la universidad de Oxford, dinero que fue destinado al centro de estudios islámicos. Dicha financiación fue apoyada por 12 países musulmanes.

El jeque Sultán bin Mohammed Al-Qassimi, de Emiratos Árabes Unidos, también ha apoyado al centro islámico de estudios islámicos de la universidad de Exeter, con mas de 5 millones de euros todos los años desde el año 2001. La universidad de Gales, también ha recibido suculentas donaciones gracias al jeque Sheikh Khalifa bin Zayed Al-Nahyan, que es gobernante de Abu Dhabi.

Mientras que los estudios islámicos son el blanco popular de los donantes, el apoyo a esta materia no está restringida. La Escuela de Negocios de la universidad de Oxford fue creada por Wafic Said, un saudí con nacionalidad siria que donó 23 millones a la causa.

Las donaciones no son los únicos vínculos financieros de los musulmanes del golfo pérsico. Según el Observatorio de la Educación Superior sin Fronteras, una de cada 200 universidades abiertas para universidades de todo el mundo se encuentra en Qatar o Emiratos Árabes Unidos, lo que se traduce en que Emiratos cuenta con 37 sucursales y Qatar con 10.

La universidad de Londres cuenta con un campus arqueológico en Qatar. Otras escuelas y universidades que cuentan con bases en Dubai, son la Heriot-Watt de Bolton, que es una escuela de negocios de Londres, así como la Manchester Business School, la Cass Business School y la universidad de Middlesex.

Todos estos campus satélite tienen dos propósitos, uno de ellos es la de poder ampliar los estudios superiores con rapidéz en los países musulmanes y así aumentar su capacidades de estudio. El otro propósito es poder acceder a los mercados potencialmente lucrativos.

http://www.minutodigital.com/2012/10/23/la-ideologia-totalitaria-islamica-llega-a-las-universidades-europeas-universidades-britanicas-financiadas-con-fondos-saudies/

En el Reino Unido están siendo juzgados 3 musulmanes acusados de planificar atentados suicidas. Los terroristas mahometanos habían calculado que con sólo una bomba podrían despedazar a unos 50 infieles. También especularon sobre el número de víctimas que fallecerían a consecuencia de un infarto producido por el terror provocado por las pavorosas deflagraciones… y estaban seguros de que muchos se mearían de miedo al escuchar las explosiones.

Nasser tiene 31 años, Irfan y Ashik 27; son desempleados con residencia en Birmingham, y en sus ratos libres, que eran muchos, planificaban atentados suicidas. Como los tres seguidores del “Profeta” vinieron al mundo sin muchas luces y eran de lengua suelta provocaron las sospechas de la Policía, que procedió a grabar las disparatadas y criminales conversaciones del trío, lo que permitió desarticular a tiempo el grupo terrorista formado por otros 12 muslimes.

El Tribunal ha escuchado cómo los acusados ideaban sus ataques suicidas; cómo pretendían atentar en las calles más concurridas del país con bombas que contenían tuercas y tornillos; cómo calculaban el número de víctimas mortales que conseguirían con un kilo de explosivos… y el motivo por el que debían actuar con contundencia: los kafires (infieles) practican el sexo con burros.

Los referenciados secuaces de Mahoma, muy bien asesorados, también tenían en mientes la fundación de un centro islámico al gusto occidental, que les serviría de tapadera para encubrir sus actividades criminales y que ya tenía concedida una dotación de 62.422 euros procedente de un “benefactor” no identificado.

Unos mahometanos penetrados por la burricie islámica, que residen en Occidente y cobran sus buenos subsidios por desempleo, quieren sembrar de muerte el país que les alimenta, pero es este caso, evidentemente, ningún multiculturalista podrá aducir que los delirantes y homicidas agarenos sólo han cometido un delito: el de buscar una vida mejor.

EL MULTICULTURALISMO EN GRAN BRETAÑA Y LO QUE NOS ESPERA EN ESPAÑA

La Comisión Especial de Apelaciones de Inmigración de Reino Unido ha evitado su deportación a Jordania, que le reclama desde hace años para juzgarle por conspiración terrorista.


NO SERÁ DEPORTADO A JORDANIA

El clérigo islámico radical Abu Qatada, encarcelado desde hace casi siete años, ha conseguido la libertad tras haber ganado un recurso judicial para evitar su deportación del Reino Unido a Jordania, país que le reclama por delitos de terrorismo.

La Comisión Especial de Apelaciones de Inmigración (un tribunal especializado en casos de seguridad nacional) dispuso que el imán de origen jordano-palestino salga hoy de la prisión de alta seguridad de Long Martin en la que está recluido.

El clérigo ganó ayer su recurso ante la citada comisión con el argumento legal de que en Jordania no recibiría un juicio justo.

El Ministerio del Interior del Reino Unido presentará un nuevo recurso, pese a haber perdido todos los que ya ha presentado contra Qatada.

Jordania le reclama para volver a juzgarle por su presunta participación en dos conspiraciones terroristas, en 1999 y 2000, por las que ya fue condenado en rebeldía, mientras que Reino Unido quiere entregarlo por considerarlo una amenaza para "la seguridad nacional".

Después de que el Ministerio asegurase haber obtenido garantías del Gobierno jordano de que ofrecería al imán un juicio justo, en el que no empleará como pruebas testimonios obtenidos bajo tortura, sus abogados acudieron, hace unos meses, a la Comisión Especial de Apelaciones de Inmigración después de que a principios de año les fuera negado el permiso para llevar su caso ante un tribunal europeo.

Tras conocerse el dictamen de la Comisión, el Ministerio de Interior informó de que tiene intención de recurrir un fallo con el que está "totalmente en desacuerdo".

Desde su llegada a Reino Unido el clérigo ha sido encarcelado y puesto en libertad bajo fianza en varias ocasiones, y los tribunales han cuestionado abiertamente su largo encarcelamiento -sin cargos- algo que también han denunciado organizaciones como Amnistía Internacional. Qatada llegó al Reino Unido como refugiado en 1994 y fue detenido por primera vez en este país en 2002.

El racismo antiblanco, antiblanquismo o eurofobia es un tipo de racismo negativo que consiste en la actitud de odio, aversión, agresión o discriminación contra la raza blanca y su cultura.

Este fenómeno posee características propias e inusuales que lo distinguen de otros tipos de racismo, por lo que resulta necesario hacer una descripción aparte. Una de esas características es el hecho de que por lo general la gente ha sido acostumbrada a no pensar en el racismo como una actitud que pueda darse contra la raza blanca, sino sólo contra otras razas, lo que la incapacita para condenar este racismo, cosa que revela la existencia de dobles estándares sociales.

El caso que hoy publicamos es un claro ejemplo. Como se ve en las imágenes (ver video), una adolescente blanca de raza blanca es brutalmente golpeada por la espalda por una persona de raza negra. La salvaje agresión dejó inconsciente a la menor, que tuvo que ser ingresada en un centro hospitalario. Pese a la aparatosidad del suceso, ningún medio británico se ha hecho eco de la noticia. Hablamos del mismo país donde la ciudadana Emma West aún sigue en prisión por supuestamente proferir insultos racistas en un autobus londinense.

También se observa que, gracias a la educación moderna y las tendencias ideológicas de la globalización o la corrección política, basadas ambas en el marxismo cultural, existen personas que inconscientemente y sin tener la intención de serlo, se convierten en antiblancos. Por eso es que, aunque pudiera parecer contradictorio, surgen antiblancos incluso entre los propios blancos, lo que se denomina como endofobia, cosa que no sucede, por ejemplo, dentro de la raza negra.

La eurofobia como problema social es un fenómeno exclusivo de la era posterior a la Segunda Guerra Mundial y es actualmente un racismo legal e institucionalizado pero astutamente encubierto. En el discurso dominante, la eurofobia es primero ignorada; cuando esto no es posible es negada, relativizada, trivializada, ridiculizada e incluso justificado abiertamente y sin consecuencias legales.

Se trata de una política genocida extraoficial de los poderes internacionales y globalistas, que consiste en la implantación de políticas calculadas para reducir la población europea o eurodescendiente, la gradual sustitución demográfica con pueblos no-blancos en países blancos, así como la supresión de derechos e incluso agresiones y asesinatos contra miembros de la raza blanca Prensa internacional

La rebelión del “vuelo blanco”. Gran Bretaña ve cómo familias blancas huyen de las zonas urbanas a las zonas rurales y barrios periféricos.

La tendencia no hace sino crecer en los últimos meses. Los británicos autóctonos que viven en zonas populares parecen haber dicho ‘basta’ a la paulatina degradación de sus estándares de vida como consecuencia sobre todo de la avalancha de residentes extraeuropeos.

En algunos suburbios de Londres, incluyendo Enfield, Waltham Forest y Redbridge, uno de cada cuatro británicos de raza blanca han decidido hallar acomodo lejos, bien lejos, del multicultural ruido. Esta inquietante tendencia se observa también en zonas urbanas próximas a la capital, como Luton, Reading, y Bedfordshire.

Mientras tanto, la población blanca británica en muchos distritos suburbanos y rurales se ha disparado, según un estudio elaborado por el Birkbeck College, Universidad de Londres, junto con Demos.

“Entre 2001 y 2011, la proporción de blancos británicos en la población de Londres cayó del 58% al 45%”, señaló el profesor de política Eric Kaufmann, de Birkbeck.

“Las cuotas de las minorías étnicas alcanzó el 40% del total, un 39% de aumento”.

“Los analistas nunca creyeron que, en Londres, la minoría pasara a convertirse en mayoría, pero las últimas cifras del censo así lo indican”, añadió
El ejemplo de Barking y Dagenham es uno de los más elocuentes. Las investigaciones demuestran que una tercera parte de la población británica blanca se trasladado entre el año 2001 y 2011.

El fenómeno ha pasado casi desapercibido hasta ahora porque los centros urbanos británicos tienden a tener una mezcla racial bastante significativa en las calles y en muchos lugares de trabajo.

El profesor Kaufmann subrayó al respecto: “Que las preferencias étnicas estén siendo la clave de estos desplazamientos masivos debería ser debidamente estudiado”.

Comparó la situación con la de Estados Unidos, “donde los estadounidenses blancos buscan áreas con más del 70% de su población de raza blanca”. Prensa internacional

Christina Edkins, una adolescente de 16 años murió hoy al ser apuñalada en hora punta en un autobús que recorría el centro de Birmingham (Inglaterra), en un ataque “muy rápido” que la policía no descarta que fuese indiscriminado.

El incidente se produjo a las 7.40 horas GMT en una de las zonas más céntricas y concurridas de esa ciudad británica, Hagley Road, cuando la víctima se dirigía al parecer al colegio, según los agentes de West Midlands.

Tras detener a un primer sospechoso que fue posteriormente puesto en libertad, la policía arrestó en las inmediaciones de un supermercado a un hombre de raza negra, de 22 años, como resultado de un “amplio dispositivo de búsqueda”.

Las fuerzas del orden informaron de que no buscan por el momento a ningún otro sospechoso y de que consideran que el supuesto atacante podría no tener ninguna relación previa con la víctima.

El detective Richard Baker señaló que se investiga la posibilidad de que el asesinato haya sido fruto de un “ataque elegido al azar”, si bien afirmó que “se barajan una serie de posibles hipótesis”.

La policía tiene previsto rastrear las redes sociales en las que interactuaba la joven apuñalada como parte de su investigación, si bien recalcó que no hay nada que sugiera que fue el objetivo de un ataque premeditado.

El autobús en el que la joven fue apuñalada se retiró al final de la mañana del lugar del luctuoso suceso, que provocó numerosas alteraciones en el tráfico de Birmingham, con atascos de hasta ocho kilómetros.

Por la tarde, la policía utilizó un camión cisterna para drenar las alcantarillas de la zona y buscar evidencias que ayuden a esclarecer el caso.

“Se trata de un caso trágico, la familia de la víctima está destrozada”, señaló Baker, que subrayó que la policía “espera todavía escuchar el testimonio de otras personas que pudieran haber sido testigos de lo que ocurrió esta mañana”.

“Esta tarde habrá una mayor presencia policial en la ciudad a raíz de esta tragedia, especialmente en autobuses y colegios de la zona, para que los ciudadanos puedan moverse con mayor confianza”, afirmó el detective. Fuente

La inmigración se ha convertido en el único asunto sobre el que todas las fuerzas políticas del Reino Unido parecen estar de acuerdo. Si bien hace unos días el viceprimer ministro, el liberal demócrata Nick Clegg, planteaba cobrar una fianza a los turistas procedentes de «países de riesgo», ahora el primer ministro, David Cameron, acaba de anunciar un polémico plan para acabar con los abusos de aquellos ciudadanos de la UE que tratan de «aprovecharse de la generosidad británica».

El primer y principal pilar del proyecto es la sanidad. La nueva política permitiría el acceso a la sanidad británica a ciudadanos europeos siempre y cuando estos puedan probar que tienen derecho a la seguridad social en sus países de origen. De lo contario, y esta medida afectaría tanto a comunitarios como ciudadanos de otros continentes, solo serían atendidos en los hospitales británicos si poseen seguro privado. «El sistema es un caos. Los inmigrantes están colapsando el sistema», ha dicho Jeremy Hunt, ministro de Sanidad.

El segundo sector que Cameron trata de modificar son las ayudas por desempleo. En el Reino Unido existe una pequeño subsidio para aquellos en búsqueda activa de trabajo que, sin necesidad de haber cotizado o tener derecho al paro, pueden reclamar entre unos 60 y 100 euros semanales. Los europeos que reciben esta prestación serán sometidos a un exhaustivo examen si, al cabo de seis meses, siguen sin encontrar trabajo.

La vivienda es el tercer pilar del proyecto para paliar el «turismo de subsidio» y desde abril se dará prioridad a los nacionales.

«Los inmigrantes no recibirán prestaciones por vivienda a su llegada. Para poder acceder a las ayudas deberán haber vivido aquí al menos durante dos años y haber contribuido al sistema», aseguró Cameron.

Problemas del plan

La prensa británica insiste en que, dado el reducido porcentaje de comunitarios que reciben estas prestaciones, el objetivo de Cameron no es el ahorro, sino satisfacer el creciente euroescepticismo que asedia al país. Prueba de ello es la reciente popularidad del Partido Independentista Británico (UKIP), cuyas políticas antieuropeas y antiinmigración han atraído a un buen número de votantes.

El proyecto de Cameron intenta calmar los temores hacia una nueva oleada de inmigrantes de Europa del Este, ya que a partir de enero del 2014 rumanos y búlgaros podrán moverse libremente por el territorio comunitario. Mientras, desde Bruselas, vigilan de cerca los movimientos del primer ministro para cerciorarse de que su plan respeta los tratados de libre circulación y residencia europeos. fuente

Un reciente estudio revela que los británicos blancos abandonan las regiones en las que se han vuelto minoritarios y son poco a poco reemplazados por inmigrantes de diversos orígenes étnicos. En consecuencia, 4.600.000 personas de origen inmigrante viven de manera intracomunitaria en aquellos lugares en que los blancos son menos de la mitad de la población.

El ex presidente de la Comisión de los Derechos Humanos, Trevor Phillips, ha declarado que “estos resultados deberían preocuparnos” y que “estas no son buenas noticias para la causa de la integración”. Y ha añadido: “Debemos inquietarnos si una mayoría de blancos abandonan las zonas pobladas por las minorías y aquellos no son reemplazados”. Ya en el año 2005, Phillips advirtió que Gran Bretaña estaba “adentrándose en la segregación” y que el país “se estaba separando en guetos de distintas razas y religiones”.

Sir Andrew Green, presidente del thin tank sobre las migraciones, declara: “Es extremadamente grave. Este estudio es la prueba innegable de que hemos sido realmente manipulados en el aislamiento demográfico, tal y como Trevor Phillips nos había advertido, y es el resultado evidente de la política de inmigración masiva del Partido Laborista”.

Este ritmo de cambio en el seno de nuestras comunidades explica en gran parte por qué muchos han votado de la manera que lo han hecho en las elecciones municipales de la semana pasada. Los argumentos a favor de una fuerte reducción de la inmigración son hoy aplastantes, ya que no podemos integrar más inmigrantes en razón de la situación actual.

Las cifras del último censo muestran que entre 2001 y 2011, el “white flight” (el éxodo de los blancos) ha alcanzado las 620.000 personas para la ciudad de Londres. Esto es el equivalente a la población de una ciudad como Glasgow los que se han desplazado fuera de la capital. Por primera vez en su historia, los británicos blancos están en minoría en la mayor ciudad del Reino Unido.

Al mismo tiempo, algunas zonas rurales han experimentado un aumento de la proporción de personas que se definen como de etnia “británica blanca”, ya que el éxodo se da generalmente hacia zonas menos urbanas.

En 2011, 3.700.000 londinenses se identificaron como británicos blancos. En 2001, estos eran 4.300.000, y eso a pesar de un aumento de la población de la ciudad de cerca de 1.000.000 de personas en la última década. En febrero de este año se dieron a conocer los datos que revelan que los británicos blancos ya no son más que el 45% de la población de Londres. Detrás de estos, vienen los asiáticos (Pakistán, India, Bangla Desh…) con un 18%, y los negros (caribeños y africanos) con un 13%.

Según el instituto Demos, este cambio es el resultado del “white flight”, el éxodo de los británicos blancos, que han sido reemplazados por inmigrantes y por el crecimiento natural de estas poblaciones étnicas. Su análisis del censo del 2011 muestra que 4.600.000 personas de origen inmigrante (el 45% del total) viven en zonas en las que los británicos blancos son menos de la mitad de la población. Esas zonas incluyen a Yardley en Birmingham y varios municipios más del este y del sur de Londres.
El estudio revela que, paralelamente, las minorías étnicas se están desplazando también hacia las partes mayoritariamente blancas.

Actualmente, ya no quedan más que 800 municipios en toda Gran Bretaña, sobre 8850, en que los blancos representan el 98% de la población. Estos eran 5000 en el año 2001. Fuente

En una sorprendente confirmación según la cual los gobiernos de Blair y Brown promovieron deliberadamente una inmigración masiva hacia Gran Bretaña, el ex ministro de comunicaciones Lord Mandelson, ha declarado que el Partido Laborista fue a buscar inmigrantes extranjeros a sus países. También ha reconocido que el flujo de llegadas se ha traducido en que los tradicionales votantes y simpatizantes del Partido Laborista tienen hoy grandes dificultades para encontrar un trabajo.

Además, el dirigente del Partido Laborista Ed Milibrand ha afirmado que su partido se había equivocado sobre la inmigración. Entre 1997 y 2010, el saldo migratorio neto ha sido de 2.200.000 personas, es decir dos veces la población de Birmingham. El número anual de entradas se multiplicó por 4 durante los gobiernos laboristas, pasando de 48.000 personas en 1997 a 198.000 en 2009.

Las palabras de Lord Mandelson llegan tres años después de que los dirigentes del Partido Laborista refutaran las acusaciones del ex consejero Andrew Neather, que reconoció que los laboristas habían fomentado la inmigración con la finalidad de “cambiarle la cara a Gran Bretaña”. Andrew Neather dijo que esa política se llevó a cabo “para obligar a la derecha a someterse a la realidad de la diversidad”. Y añadió que ese programa tenía “una meta política: hacer que la inmigración masiva fuera el medio para el gobierno de hacer de Gran Bretaña un país realmente multicultural”.

Los dirigentes del Partido Laborista han tardado en reconocer sus errores. Sin embargo, durante un congreso del think tank Progress, Lord Mandelson dijo: “En 2004, cuando eramos miembros del gobierno laborista, no sólo acogíamos a inmigrantes, además enviábamos agentes de reclutamiento a distintos países para animar a las personas a venir a instalarse en Gran Bretaña.

El problema se ha agravado durante el periodo de estancamiento económico de estos últimos 5 o 6 años. Cuando el Partido Laborista promovió las nuevas entradas, estábamos casi en una economía de pleno empleo, pero la situación es hoy muy diferente”. Y ha añadido: “Tenemos que darnos cuenta de que la llegada al mercado de trabajo de muchas personas de origen no británico es muy duro para los que ya tienen dificultades para encontrar un empleo o de conservar el que tienen. Para estas personas, la inmigración pesa muy fuerte en sus vidas y su mundo, es un hecho innegable y debemos entenderlo y ocuparnos de él”.

El presidente de los conservadores Grant Schapps ha declarado: “La cándida confesión de Peter Mandelson según la cual los gobiernos del Partido Laborista fomentaron deliberadamente la inmigración hasta hacerla incontrolable es otra prueba de cargo en su gestión de la inmigración”.

Por su parte Sir Andrew Green de “Migration Watch” ha indicado: “Es una confesión asombrosa el que la inmigración masiva de los laboristas fuera deliberada. Sus votantes de la clase trabajadora tardarán mucho en perdonarles por los cambios enormes que han impuesto a sus simpatizantes”.

Gordon Brown ha acusado a los conservadores de imitar a Enoch Powell por utilizar la inmigración con el fin de desviar la amenaza creciente representada por el UKIP (partido que propugna la salida de la UE y que ha experimentado un crecimiento importante en las últimas elecciones municipales). fuente

Joseph Haigh, de 14 años de edad, fue víctima de una paliza salvaje sufrida a manos de un grupo de 15 jóvenes musulmanes en Thornhill, Inglaterra, el pasado viernes. La banda lanzó insultos racistas hacia él, refiriéndose constantemente al color de su piel. Aún así, la policía se retracta de calificar la agresión como un delito racista.

Jonathan, el padre de Josehp, ha declarado: “fue un ataque racista”. “Le llamaron basura blanca y blanco de mierda fuera de aquí”. Esto es por lo que la gente está cabreada por lo que está pasando en este país. SI hubiera sido un ataque protagonizados por blancos hacia no blancos, entonces hubiera sido definido como un ataque racista. Cuando es el caso contrario no interesa que la gente lo sepa”.

Joseph salió con sus amigos la noche del viernes a las 21:00 horas, cerca del Rectory Park de Thornhill’s cuando la banda de musulmanes, de edades comprendidas entre los 18 y 20 años, fueron a por ellos. Los amigos de Joseph se dispersaron y el propio Joseph intentó escapar con su bicicleta, pero terminó confrótandose con uno de los pandilleros que terminó por reventarle medio ladrillo en la cabeza.

El señor Haigh, camionero de profesión, explicó como este golpe repentino dejó a su hijo inconsciente y que él instintivamente se limitó a poner sus manos sobre su cara para protegerse. “Otro se dedicó a pincharle con un destornillador, mientras que el resto se dedicaban a darle patadas y puñetazos en su cabeza”, declaró el padre de Joseph. “Ellos querían destrozarle la cara, es por ello que le han dejado las manos destrozadas”.

Al chico le atravesaron una mano, le rompieron la otra y le hicieron un corte en la frente que le llega hasta el cráneo. Si le hubieran dado con el ladrillo en la cabeza un poco más fuerte de como lo hicieron, Joseph habría muerto. “Los jóvenes musulmanes tan sólo pretendían matarlo”, aseguró el padre. Fuente