La función del timo en el cuerpo humano

El timo es un órgano de dos lóbulos que se encuentra en la cavidad superior del pecho, parcialmente dentro de la región del cuello, entre los pulmones, debajo de la glándula tiroides y detrás del esternón.

Su principal función es la producción, maduración y diferenciación de los linfocitos T, células del sistema inmune, indispensables para combatir diferentes antígenos extraños que puedan invadir nuestro organismo.

Hay 3 tipos de linfocitos T: citotóxicos, son los que unen directamente a los antígenos del patógeno y lo eliminan; auxiliares, precipitan la producción de anticuerpos por los Linfocitos B y también producen sustancias que activan otras células T y los reguladores o supresores, son las que suprimen la respuesta de las células B y otras células T a los antígenos.

Una vez maduros, dejan el timo y se transportan a través de la sangre a los ganglios linfáticos y el bazo.

Era conocido en la Antigua Grecia por el origen de la palabra Thymos, que significa “corazón o alma”, posiblemente a raíz de su localización en el pecho, “cerca de donde se sienten, de forma subjetiva, los deseos y las emociones”.

Galeno fue el primero en darse cuenta de que el tamaño de este órgano cambiaba de tamaño a lo largo de la vida. En 1961, Jacques Millar descubrió su importancia en el sistema inmune, al extraer mediante una cirugía el timo de un ratón de 3 días de edad y observar la deficiencia que sufrió posteriormente su cantidad de linfocitos.

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