España no necesita inmigrantes

El fenómeno de la violencia callejera provocada por las bandas latinas no cesa en Madrid. El desafío que supone para la Policía controlar las agresiones y peleas multitudinarias, en las que son habituales las armas blancas e incluso de fuego, ya ha traspasado las fronteras de los barrios con mayor presencia de estas bandas y ha llegado a zonas acomodadas donde el fenómeno era desconocido hasta ahora. En el madrileño barrio de Las Tablas, una zona residencial, la presencia de estas bandas se ha disparado en los últimos meses. Este mismo fin de semana se ha cobrado su primera víctima: un joven de 19 años ha resultado herido grave tras recibir cinco puñaladas cuando salía del metro.

Las bandas latinas principales, como los Dominican Don’t Play (DDP), los Trinitarios, Lating Kings, Blood, Ñetas, Forty Two, y Mara Salvatrucha están en plena fase de expansión. El plan antibandas de la Delegación del Gobierno ha resultado insuficiente para contenerles en sus límites y tratar de erradicar la violencia. La Justicia también se ha puesto seria ante su amenaza: hay cuatro miembros de los Trinitarios que se enfrentan a la prisión permanente revisable por un asesinato.

Esa expansión, tal y como confirman fuentes policiales, les ha llevado a poner en disputa algunas zonas acomodadas del norte de Madrid. Por ejemplo, los barrios de Montecarmelo, Sanchinarro o Las Tablas. Este último, donde tienen su sede grandes empresas como Telefónica o BBVA y donde residen decenas de miles de familias, es el último en sumarse a la larga lista de zonas afectadas por la presencia de bandas latinas.

4 pandilleros apuñalan a un chico

La Policía Nacional ha detenido a cuatro jóvenes, entre ellos el autor material de 17 años, por apuñalar ayer por la tarde un hombre de 19 años y de origen dominicano en el madrileño barrio de Las Tablas, ha informado a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de la Policía de Madrid.

Los hechos tuvieron lugar este domingo a las 18:30 horas en la salida de estación del Metro, en la calle Palas del Rey. Varios jóvenes se abalanzaron contra otro, que recibió tres puñaladas por la espalda, una en la pierna y una quinta en el codo. Fue trasladado en una ambulancia del Samur-Protección Civil al hospital de La Paz con pronóstico reservado.

Hasta el lugar llegaron agentes de la Policía Judicial, Información y Científica de la Policía Nacional, que localizaron a los presuntos agresores en la calle Molins del Rey, en el barrio de Valverde. El autor material de los acuchillamientos es un menor de 17 años de nacionalidad paraguaya. El resto tienen entre 18 y 23 años y son dos españoles y un salvadoreño.

Todas las hipótesis están abiertas pero todo apunte a que se trate de una reyerta entre miembros de bandas juveniles violentas. El herido permanecía hoy en el hospital recuperándose de las heridas, han indicado las mismas fuentes.

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Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en Palma (Mallorca) una banda de carácter violento que se autodenominaba «Caserío 24/7» y han detenido a ocho personas, todas de origen latino, por su pertenencia a un grupo criminal que cometió distintos delitos de amenazas, lesiones, robos con fuerza y robos con violencia.

Los integrantes de este grupo venían cometiendo una serie de hechos delictivos en beneficio del grupo y de sus miembros. Uno de ellos ha sido detenido también por un delito contra la salud pública tras intervenir varias bolsas con cogollos de marihuana preparadas para su distribución.

Los miembros de la banda fueron detenidos anteriormente hasta en 40 ocasiones –sin contar las detenciones previas a la integración en el grupo criminal– y utilizaban la violencia como medio para asegurarse el control sobre una determinada zona.

En las numerosas actuaciones policiales generadas por la actividad del grupo se intervinieron varias armas blancas –cuchillos y machetes– que utilizaban para la comisión de los mismos.

El grupo había fijado su base en una antigua sucursal bancaria donde se generó una situación de mucha tensión con los vecinos que vivían angustiados ante los continuos problemas. Más tarde, la banda amplió su control sobre otra sucursal bancaria y otro local comercial en Palma. En algunas intervenciones policiales fueron localizados menores de edad que se habían fugado de sus domicilios y se habían refugiado allí.

Era un grupo jerarquizado

Según los investigadores, se trata de un grupo jerarquizado, estructurado y con roles muy definidos, cuyos integrantes son tanto mayores como menores de edad. La cúpula está dirigida por cinco individuos, con un líder que tenía una denominación propia que le diferenciaba del resto. Actuaban de forma coordinada, concertando previamente su actividad, para lo cual se establecían en tríos o cuartetos y se iban intercambiando entre ellos. Los integrantes captaban a otros jóvenes, algunos de ellos menores, a través de redes sociales o en institutos.

La operación ha sido desarrollada por la Brigada Provincial de Información de Baleares en coordinación con la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, bajo la dirección del Juzgado de Instrucción número tres de Palma de Mallorca y ha contado con el apoyo y colaboración de unidades de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional y el GAP de la Policía Local de Palma.

La investigación se inició el pasado mes de junio cuando los agentes detectaron a un grupo de jóvenes dedicados a la ocupación de locales que posaba en redes sociales con armas y sustancias estupefacientes.

El pasado martes 7 de marzo se llevó a cabo la fase operativa, practicando registros y procediendo a la detención de siete personas, cinco mayores de edad y dos menores de edad. Además, se interceptó a un tercer menor, de 13 años, que debido a su edad es inimputable y que fue trasladado a un centro de menores.

En los registros no se localizó al supuesto líder del grupo, por lo que siguieron con las gestiones para su hallazgo y fue localizado y detenido al día siguiente en un parque de Palma. Estaba acompañado de un menor y ambos iban armados con cuchillos. El pasado jueves, 9 de marzo, pasaron por la tarde los mayores a disposición judicial, decretando el juez de guardia prisión provisional para tres de ellos.
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Agentes de la Policía Nacional detuvieron el lunes en Valencia a un inmigrante ilegal de 27 años de edad y origen gambiano, que estaba siendo buscado como presunto autor de cuatro delitos de robo con fuerza en varias casas habitadas, dos de robo con violencia y dos delitos de lesiones. El sospechoso contaba ya con más de 20 antecedentes penales por robos a viviendas.

La investigación se inició a primeros del mes de junio después de que los agentes de la Policía Nacional recibieran varias denuncias. El detenido cometía lo que se conoce como «robos silenciosos» en el valenciano distrito de Marítim.

Escalaba por las ventanas y balcones de viviendas para, una vez dentro, sustraer objetos tecnológicos y tarjetas de crédito que después utilizaba o vendía a otras personas.

En uno de estos robos, el detenido fue sorprendido por los habitantes de una de las casas y golpeó a uno de ellos. En el forcejeo, la víctima resultó herida en un ojo e, incluso, llegó a mudarse de casa como consecuencia del miedo a sufrir un nuevo robo.

Las pesquisas de los agentes lograron la rápida identificación y detención de este individuo, al que le constaban 22 detenciones previas por hechos similares. Se ha decretado su ingreso en prisión.

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De las 37.168 detenciones realizadas en 2022 y 2023, sólo 8.072 fueron realizadas a españoles

Antaño Barcelona era considerada una de las ciudades más atractivas de España e incluso del continente europeo. Una realidad que se fue difuminando durante los años de Gobierno de Ada Colau, transformando la ciudad condal en un lugar en el que los delincuentes campan a sus anchas.

Esto se debe, en parte, al aumento de la población extranjera en la capital catalana, una deriva que ha ido creciendo sin ningún tipo de control año tras año. A inicios de 2023, el número de personas de nacionalidad extranjera empadronadas era de 391.703, un 7,8 % más que en el mismo periodo del año anterior. Con este aumento, casi 1 de cada 4 personas residentes en Barcelona son de otra nacionalidad... Un dato que carecería de importancia si no hubiera repercutido en las actividades delictivas.
Y es que entre enero de 2022 y diciembre de 2023, el 78,8 % de los detenidos en la ciudad condal eran extranjeros. Un dato demoledor, obtenido a partir de los datos facilitados por la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra. En concreto, en estos dos años se cometieron 37.168 detenciones. De estas, casi 30.000 pertenecían a la población extranjera de la ciudad... Unos datos que salen a la luz a requerimiento del grupo municipal de Vox en Barcelona.

Hurtos, el delito más repetido
De los datos desgranados de ambos informes, los hurtos son los delitos que más se han cometido a lo largo de los últimos años. En concreto, en este periodo se realizaron casi 8.000 detenciones relacionadas con este delito, de los que 7.154 pertenecían a la población extranjera. En lo que respecta a robos con violencia e intimidación, fueron 4.152 arrestados de otros países, por algo más de 1.000 españoles. En el caso de la Urbana la proporción es algo menor –4.738 detenidos de otros países, y 730 de nacionalidad española–

En cuanto al tráfico y consumo de drogas, los arrestos de extranjeros superaron de igual manera a los españoles. En concreto, en este periodo la Guardia Urbana detuvo a 936 extranjeros, en comparación a los 394 nacidos en España.

Con respecto a los delitos contra la libertad sexual, la policía catalana detuvo a 143 –de 177– extranjeros, mientras que los Mossos arrestaron a 434 personas procedentes de otros países y 193 españoles.

Los datos continúan subiendo

Con el paso de los meses, aquellas detenciones relacionadas con la población extranjera no han hecho más que subir. En los primeros meses de 2022, la Guardia Urbana detuvo a casi 3.000 personas, de las que el 76 % eran inmigrantes.

Ahora, año y medio después, el balance global no deja lugar a la duda, evidenciando la decrepitud y el desmoronamiento de Barcelona, una urbe que con el paso de los años se ha convertido en una ciudad sin ley.

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España lleva años experimentando crecidas constantes en el número de extranjeros que pueblan el país. Bien sean nacionalizados o no, el número de personas que han nacido fuera de nuestra nación es enorme. Para entender mejor los cambios sociales que estamos viviendo, hay que acudir al INE para analizar las cifras que desglosan estos incrementos.

El pasado mes de diciembre conocimos que el saldo migratorio de España con el exterior (la diferencia entre inmigraciones y emigraciones exteriores) fue positivo en 727.005 personas en 2022, por lo que se convierte en el mayor saldo en los 10 últimos años, según se desprende de la Estadística de Migraciones y Cambios de Residencia (EMCR)' correspondiente al 2022 y publicada en el INE.

Comparando con años anteriores, la subida es descomunal. En 2021, la cifra se situó en 191.094; en 2020, a 219.357; en 2019, a 454.232; en 2018, a 334.158; en 2017, a 163.272; y en 2016, a 87.422. Hay que acudir a 2015, 2014 y 2013 para encontrar dígitos negativos de 1.761, 94.976 y 251.531, respectivamente.

En cuanto al saldo migratorio de los extranjeros con el exterior, ascendió a 729.709 personas en 2022, resultado de los 740.701 nacidos en el extranjero, a los que hay que restar 10.992 nacidos en España. Por nacionalidades, destacan la colombiana (con 152.634), la ucraniana (85.978) y la venezolana (72.086). Por el contrario, el saldo migratorio de los españoles con el exterior fue ligeramente negativo, con 2.704 menos entradas netas procedentes del exterior.

El dato relevante es que, a fecha de 1 de abril de 2023, tal y como refleja la captura del INE que se adjunta tras estas líneas, la población residente en España es de 48.196.693 personas, de los cuales 8.307.497 han nacido en el extranjero. Es decir, un 17,23% de las personas que viven en nuestro país han nacido fuera de él. Dicho en voz alta es impresionante.

La población de España aumentó en 598.634 habitantes en 2022, superando la histórica barrera de los 48 millones en enero de 2023, a tenor de los resultados del Censo de Población publicados por el Instituto Nacional de Estadística. Este incremento, evidente, se debe única y exclusivamente a la masiva llegada de extranjeros. Esto supone un incremento del 1,26% respecto a enero de 2022, cuando nos situamos en 47.486.727 habitantes.

En el caso de los extranjeros, la cifra en España ha ido aumentando progresivamente en los últimos años. El 1 de enero de 2001, había 1.572.013. En 2011, 5.252.473. En 2021, 5.402.702 en 2021. El 1 de abril del pasado curso, los citados 8.307.497 extranjeros.

España supera en extranjeros a Francia

Ahondando en la dimensión que supone tener un 17% de extranjeros, si acudimos al país vecino la cifra cobra mayor significado. Los españoles siempre hemos tenido, por norma general, la percepción de que Francia es una nación con mucha más población foránea que nosotros, especialmente por su conexión histórica con antiguas colonias del norte de África como Túnez, Argelia o Marruecos, por ejemplo.

Sin embargo, el dato siempre se va a anteponer a la fuerza del relato. Del total de 67,8 millones de personas que habitan Francia, únicamente 7 millones son extranjeros. Desglosando los dígitos, Francia cuenta con 2,5 millones de extranjeros nacionalizados, 4,5 de extranjeros de otras nacionalidades y apenas 800.000 extranjeros nacidos en Francia. En total, un 10% de la población francesa ha nacido fuera de las fronteras galas.

España tiene un 7% más de forasteros que Francia, algo a priori sorprendente. En términos sociológicos, la llegada masiva de inmigrantes al país vecino fue en las décadas de los cincuenta, sesenta y setenta, principalmente. Por lo que hay una importante cantidad de personas que ya pertenecen a segunda y tercera generación. En España, el boom de los extranjeros, aparte del último lustro, fue en los primeros compases del siglo XXI.

Sea como fuere, la realidad es que España es, en pleno inicio de 2024, una de las naciones con más extranjeros de toda la Unión Europea. Y, viendo la tendencia de llegada y nacionalizaciones masivas a las que el Gobierno no sólo no pone freno, sino que las facilita, en los años venideros estas cifras serán mucho mayores. Tiempo al tiempo.

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La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha asegurado que aumentarán las plazas del sistema de acogida de protección internacional y de atención humanitaria, ante el aumento de la llegada de inmigrantes ilegales, con el despliegue de nuevos centros, para mejorar la eficacia de «un sistema tensionado» y con plazas reservadas para personas con discapacidad y centros orientados a víctimas de violencia de género.

«En el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, tenemos previsto aumentar las plazas del sistema de acogida de protección internacional y de atención humanitaria que se gestionan directamente por el departamento en esta legislatura», ha indicado Elma Saiz este miércoles durante la Comisión de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, en el Congreso de los Diputados

Los «nuevos centros» que, según ha precisado, se van a ir «desplegando», son necesarios para «mejorar la eficacia de un sistema tensionado que requiere cada vez más de una gestión integral de flujos migratorios mixtos», particularmente, en Canarias.

En este campo de actuación, la ministra ha avanzado que van a consolidar la colaboración con organizaciones internacionales como el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional de Migraciones (OIM) y a reforzar su trabajo con la Agencia para el Asilo de la Unión Europea.

También ha asegurado que van a prestar «especial atención» a colectivos como los inmigrantes del colectivo LGTBI «potenciando la red de centros de acogida» para estos demandantes de protección internacional por razones de LGTBIfobia. También se tendrá en cuenta la vulnerabilidad de las personas con discapacidad, a las que se reservará un porcentaje de plazas.

Saiz también ha afirmado que avanzarán en la mirada «de género» de la política migratoria, «singularmente con la protección a las mujeres y niñas víctimas de violencia de género», ampliando el número de recursos, plazas y actuaciones específicas. En concreto, ha puntualizado que «varios de los centros de gestión pública que se están desplegando en el territorio tienen por población objetivo este colectivo».

Además, la ministra se ha comprometido a «habilitar mejores vías para la migración regular y ordenada» y a modificar el reglamento de extranjería, con el objetivo de reducir las múltiples «figuras de permisos ahora vigentes».

Para ello, ha anunciado, entre otras medidas, que simplificarán las autorizaciones de estancia, de residencia y de residencia y trabajo, así como de los procedimientos administrativos y de los requisitos para su tramitación; potenciarán la tramitación telemática de los procedimientos de extranjería y regularán «un estatus propio» de familiares de ciudadanos españoles.

Asimismo, ha avanzado que completarán la transposición de la Directiva de tarjeta azul, adaptando las condiciones para la obtención de un permiso de residencia de larga duración de la UE a los titulares de una Tarjeta azul-UE; adaptarán la regulación de las estancias por estudios a la Ley del Sistema Universitario que modificó la Ley Orgánica de Extranjería, y desarrollarán reglamentariamente la autorización de víctimas de violencia sexual cumplimentando lo previsto en la Ley de garantía integral de la libertad sexual.

Igualmente, la ministra se ha comprometido a incorporar en la reforma del reglamento de Extranjería el desarrollo de la modificación de la Ley Orgánica de Extranjería para conceder estancias de estudios para la totalidad del Grado Universitario, en vez de anuales.

En esta línea, Saiz ha puesto de relieve el arraigo para la formación que «ha beneficiado ya a cerca de 32.000 personas que se encuentran realizando una formación que mejorará su integración laboral» y ha destacado que más de 3.000 han finalizado la formación y ya han obtenido una autorización de trabajo.

Desde el punto de vista de la gestión, Elma Saiz ha afirmado que van a mejorar el sistema «acelerando» el cambio de modelo de las oficinas de extranjería, aprovechando el potencial de la Unidad de Tramitación de Expedientes de Extranjería (UTEX) como «pulmón externo» de las Oficinas de Extranjería, y fomentando la unidad de criterio y aplicación en las Oficinas de Extranjería, «evitando las disfunciones que genera su bicefalia, unificándolas en el Ministerio».

Por otro lado, dentro de las relaciones bilaterales, la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha avanzado que el Gobierno seguirá «profundizando» en la nueva etapa en sus «relaciones bilaterales con Marruecos», y ha recordado que han firmado «una veintena de acuerdos para fortalecer la cooperación en la lucha contra la trata de personas y contra el terrorismo, la cooperación migratoria o la promoción de las empresas exportadoras y de las empresas españolas en Marruecos».

Asimismo, ha añadido que reforzarán e iniciarán líneas de trabajo con los principales países emisores y de tránsito de migrantes como Senegal, Mauritania, Estados Unidos, Canadá, América Latina.
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